Con la exhibición de Davide Frattesi, autor de un doblete decisivo, y la sentencia de Lautaro Martínez en los minutos finales, el Inter Milán cerró su goleada ante el Empoli (0-3) y respondió al Nápoles, al que persigue de cerca en la lucha por el 'Scudetto'.
Lautaro se encargó de cerrar la goleada en la noche de Davide Frattesi. El delantero argentino, capitán interista, se convirtió en el máximo goleador extranjero del Inter en solitario, agrandando su ya gigante impronta en el club italiano. Sin embargo, el protagonista fue indiscutiblemente Frattesi, decisivo para abrir el partido cuando más encerrado estaba el Empoli.
Condenado a ser siempre un jugador de rotación por el nivel de su competencia, aunque ganándose desde hace meses la titularidad a pulso con actuaciones decisivas, Davide Frattesi volvió a ser la mano ejecutora del Inter cuando más lo necesitaba el combinado 'nerazzurro'.
Porque en un partido cerrado en el que el Empoli construyó un muro defensivo, obligado principalmente por la temprana expulsión de Goglichizde a la media hora de partido, fue Frattesi el encargado de desbloquear y sentenciar para mantener al Inter en la estela del Nápoles. Un experto llegador en segunda línea que Luciano Spalletti utiliza con mucha asiduidad en la selección italiana, donde suele aparecer también su faceta goleadora.
Su potencia física y su olfato goleador le convierten en un jugador muy valioso que, sin embargo, en el Inter, aunque siempre importante, autor de goles decisivos en la temporada del 'Scudetto', queda en demasiadas ocasiones en un segundo plano minimizado por el nivel de los Barella, Calhanoglu o Mkhitaryan, titulares asentados.
Ante la 'Juve', en el Derbi de Italia (4-4), de hecho, incluso pese a la ausencia de Calhanoglu, fue suplente después de que Inzaghi eligiera a Zielinski. La respuesta de Frattesi, con un doblete reivindicador, no pudo ser más contundente.
Todo en un partido, claro, controlado por el actual campeón, en el que el Empoli, mermado por la inferioridad, apenas inquietó a Sommer. Marcó Darmian en los primeros minutos, pero el gol le fue anulado por mano en la juagada previa.
El gol pareció resistirse, pero acabó llegando tras el empuje constante de los visitantes. Y lo hizo en una jugada clásica del Inter. Centro lateral de un Bastoni profundo al segundo palo para que Darmian lo dejara manso en el corazón del área. Allí llegó Frattesi para, con algo de fortuna tras el rebote en una pierna del Empoli, marcar el primero nada más iniciar el segundo tiempo.
Tuvo que salir de su encierro el Empoli y el Inter, en estos casos, y más con la superioridad numérica, es matador. En una jugada poco después, preciosa de los de Milán en la que Lautaro volvió a ser conductor clave de la posesión, llegó el segundo.
El 'Toro' dejó de tacón en la frontal porque vio la llegada de Frattesi, que definió ajustado para encarrilar una victoria que finiquitó el propio Lautaro, haciendo buena la presión alta del Inter y la asistencia de Barella en el minuto 79, cruzando el balón al palo largo, imparable para Vásquez.
El Inter, después de la victoria del Nápoles ante el Milan, no falló en una salida siempre complicada y, en la gran noche de Frattesi, se mantiene en la pelea, a 4 puntos del liderato.