José Ismael Vences Valle es suboficial superior (SS) PNP de la Dirección de Tecnología de Información y Comunicaciones (Dirtic). Forma parte de un equipo que impulsó cambios tecnológicos en la institución y creó los sistemas de denuncias, registros y de información policial que hoy, según sus palabras, redujeron los tiempos y distancias entre la Policía y la población.
Después de tres décadas de camino recorrido, José se siente satisfecho de contribuir a que su
Policía Nacional, así lo dice, mejore sus servicios. Reconoce que faltan recursos financieros; sin embargo, la institución cuenta con personal motivado por la vocación de servicio que lo inspira a dar lo mejor de sí para ella.
Hoy es suboficial superior (SS) de la PNP y desde hace 16 años trabaja en la Dirección de Tecnologías de Información y Comunicaciones (Dirtic). Ha sido testigo de los cambios que se han producido en esa unidad que antes solo daba soporte técnico a las demás áreas y direcciones.
Como especialista en sistemas informáticos e implementación de sistemas policiales, Vences Valle recuerda que en el 2009 fue convocado para ser parte del grupo de analistas que impulsaría cambios tecnológicos capaces de reemplazar los enormes libros de denuncias, ocurrencias y detenidos que tenían las
comisarías.
“Creamos el sistema de denuncias policiales que hoy le permite a la ciudadanía ir a una comisaría a presentar la denuncia y recogerla en otra si es necesario, en menos de 24 horas. Nosotros, que habíamos hecho calle, que habíamos pampeado, nos dimos cuenta de que podíamos generar grandes cambios”.
Así ocurrió en el 2013. Ese año se intensificaron las inversiones en tecnología, y obtuvieron servidores con gran capacidad de memoria y almacenamiento que permitieron que todos los libros que usaban fueran reemplazados y que la Policía contara con una gran base de datos como para identificar a un
cogotero en cualquier lugar del país.
Tecnología y vocación
En su Sullana natal, camino a la escuela donde estudió, Ocho de Diciembre, observaba durante el trayecto a los uniformados que cuidaban a la gente. Eran sus héroes, rememora, sentía confianza cuando los veía cerca de él. Creció con la certeza de ser
policía en los tiempos en que había tres fuerzas: Guardia Republicana, Guardia Civil y Policía de Investigaciones.
En setiembre de 1988 ingresó a la Escuela de Suboficiales de la PNP y perteneció a la última promoción de la Guardia Civil. Se abrió una etapa de su vida que tanto había deseado tener. Fue trasladado a Moquegua para iniciar sus funciones en la comisaría del Ilo y, dos años después, lo reubicaron en el Callao para integrar el escuadrón de emergencia y asumir otras labores. Los vecinos chalacos lo acogieron durante 12 años.
Después, la
Dirtic le dio la oportunidad de aportar a la modernización del servicio y desde allí contribuyó con un grupo de colegas a crear el sistema de denuncias (Sidpol) que usan las comisarías; de registro (Sirdic), que utiliza la unidad de investigación criminal; y de información policial, que sirve para consultar las requisitorias y antecedentes (Sinpol).
“Todo cambió, logramos un sistema integrado de servicios. En nuestra unidad trabajamos policías con vocación para realizar grandes cambios tecnológicos en nuestra institución. Creamos también el sistema de registro de medidas de protección que dicta el juez para la mujer víctima de violencia. Tenemos carencias, pero también un personal dispuesto a hacer grande a nuestra institución.” José tiene palabra.
Más en Andina:
(FIN) DOP/ SMS
Published: 7/11/2018