La Unión Europea y la ONU presionaron al gobierno español para que dialogue con los independentistas catalanes, que amenazan con una declaración unilateral de independencia tras el referéndum prohibido del domingo, marcado por violentas cargas policiales.
En un comunicado, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos pidió al gobierno conservador de Mariano Rajoy investigaciones "completas, independientes e imparciales" sobre "todos los actos de violencia" ocurridos el domingo en Cataluña.
Policías y guardias civiles recurrieron a porras, patadas, empujones y pelotas de goma contra manifestantes decididos a votar y entraron por la fuerza en colegios para requisar urnas y papeletas.
Rajoy afirmó que se limitaron a cumplir "con su obligación" pero, desde Barcelona, los independentistas denunciaron una "represión injustificada".
Desde el gobierno regional, aseguran que 896 personas precisaron atención médica y dos de ellas tienen "pronóstico reservado".
La Unión Europea (UE) pidió también a Madrid y Barcelona "pasar rápidamente de la confrontación al diálogo", mientras el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, urgió a Rajoy a evitar un nuevo "uso de la fuerza". Y el miércoles, la Eurocámara debatirá sobre la cuestión.
Durante la jornada, Rajoy habló con Tusk y los presidentes de la Comisión Europea y del Parlamento Europeo, anunció la Moncloa en un comunicado. En esas conversaciones, les transmitió que "impedir el referéndum ilegal contribuye a mantener la estabilidad y la democracia" en Europa.
Desde Barcelona, el presidente catalán Carles Puigdemont solicitó una mediación, que según él debe ser internacional "para que sea eficaz". "Si hay una mediación, hablaremos de todo. Si no la hay, también hemos explicado lo que pasa", advirtió.
Y su plan en este sentido pasa por una declaración de la independencia de esta región de 7.5 millones de habitantes ubicada en el noreste de España.
(FIN) AFP/SMA
Published: 10/3/2017