En la cabina del vuelo AI-171 de Air India, el 12 de junio de 2025, la normalidad se desvaneció en segundos. El avión con destino Londres-Gatwick con 242 personas a bordo pareció estancarse en el aire justo después del despegue, recuerda Vishwash Kumar Ramesh, el único superviviente en la que es ya una de las peores tragedias aéreas del país.