La División de Investigación Criminal (Divincri) Cusco confirmó esta tarde el hallazgo del cadáver de la joven madre de familia Ruth Karina Sotelo Huayhua, de 19 años, reportada como desaparecida hace 10 días en el distrito cusqueño de San Jerónimo.
Los restos de la mujer estaban enterrados en un hoyo, en medio de una quebrada del sector Campanayoc, de la comunidad de C’achupata, hasta donde llegaron los policías, peritos en criminalística y representantes del Ministerio Público.
Después de varias horas lograron retirar los restos y trasladarlos a la morgue central para las pericias que permitarn determinar las causas del crimen; Wilson Nazario Yucra Chávez, expareja de la víctima y de 25 años, fue detenido.
El comandante PNP Luis Cordero confirmó a la Agencia Andina que el presunto homicida fue detenido el último domingo y confesó la participación en el presunto delito contra la vida, el cuerpo y la salud.
Indicios
“Luego de los indicios y las diligencias realizadas se logró identificar el lugar exacto”, señaló el oficial, al sostener que inicialmente el caso de la joven madre era por desaparición y conforme al avance de las pesquisas se determinó el asesinato tras una discusión.
Martha Sotelo, hermana de la víctima, denunció que la fiscal responsable del caso, Xiomara Bedoya, no habría actuado de manera adecuada desde un principio.
Según manifestó, en un principio, cuando las hermanas de Ruth Karina denunciaron la aparición de sangre en la habitación de la joven madre, las autoridades no actuaron de manera célere; el presunto homicida acudió a la comisaría de San Jerónimo y salió libre porque la policía dudó que fuera él presunto autor.
Madre trabajadora
Ruth Karina, natural de Apurímac, se dedicaba a la venta de comida al frente de la comisaría de San Jerónimo para mantener a su hijo de 2 años; y hace tres meses, por los constantes maltratos del ahora detenido Yucra Chávez (taxista), decidió terminar la relación, por lo cual este le habría arrebatado la vida.
Hoy, durante el retiro de los restos, no estuvieron las hermanas de Ruth Karina, quienes desconocían de las diligencias en Campanayoc.
Una fiscal, que no se identificó, intentó evitar el trabajo de los medios de comunicación mientras se cumplían las diligencias.