Integrantes de los hogares que ya recibieron el Bono 600 y que son usuarios de Juntos o que tienen algún miembro usuario de Pensión 65 o Contigo, programas sociales adscritos al Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), coinciden al señalar que utilizarán los 600 soles del subsidio para adquirir alimentos y medicinas.
Esos hogares, considerados los de mayor vulnerabilidad, pertenecen al grupo 1 de beneficiarios del bono, cuyo proceso de pago se inició el 17 de febrero. El Bono 600 apunta a minimizar los efectos negativos en la economía de los hogares en situación de vulnerabilidad y de pobreza o pobreza extrema de Áncash, Apurímac, Huancavelica, Huánuco, Ica, Junín, Pasco, Lima Región, Lima Metropolitana y Callao, regiones inicialmente clasificadas con alerta extrema por el covid-19.
Optimista inquebrantable
Nada le borra la sonrisa. Ni la mascarilla. Ni siquiera la fractura de clavícula que hace casi un año, al inicio de la emergencia sanitaria, lo llevó de su Huaura querida a la capital y que aún le impide abrazar con fuerza. Ahora que ya recibió el Bono 600, Osbino Espinoza Rivera, usuario de Pensión 65, respira más tranquilo que de costumbre.
“Estoy contento porque el bono me ayuda mucho. Con esta platita voy a comprar remedios para superar de una vez el dolor en mi hombro”, dice el pequeño agricultor de 73 años que cada noche sueña con volver a cosechar deliciosos duraznos en su chacrita del norte chico.
“Por la caída que tuve ya no puedo trabajar. El bono me aliviado en algo económicamente”, afirma Osbino, quién vive junto a su esposa en un cuarto alquilado en San Juan de Lurigancho y nunca pierde el optimismo por más cuesta arriba que se le ponga la vida.
Patriota hoy y siempre
A sus 80 años, el escudo nacional que luce al centro de su gorra combina perfecto con su porte militar. Óscar Cahuana Tordoya no pierde oportunidad para mencionar, orgulloso, que hace décadas vistió el uniforme del Ejército del Perú. Usuario de Pensión 65, este vecino de El Agustino también se siente aliviado con el Bono 600 en su bolsillo.
“La verdad, todo lo que ha traído esta pandemia me ha dejado mal económicamente. Este bono me ha dado alegría. Lo voy a usar para comer y pagar algunas cuentas”, señala Óscar, quien a paso lento, pero seguro, saluda, de colega a colega, a cada soldado que ve por la calle en esta época difícil. “Yo quiero mucho a mi país. ¡Viva el Perú!”, decreta sin tapujos.
Contenta en quechua
Alejandra Quispe Micuylla no olvida su natal Ayacucho. Le brota, incluso, en cada palabra que dice. Ella piensa, habla y agradece en quechua. “He recibido el Bono 600. Ahora tengo para comprar víveres y comer en casa. Estaba preocupada, pero ya no. Ahora estoy contenta. Gracias a todas las personas que han hecho posible esto”, es la traducción en castellano de lo que dice Alejandra, de 86 años.
Aunque ya se acostumbró a recibir su Pensión 65 en El Agustino, ella añora su sierra, sus animales, su clima, sus fiestas costumbristas. Solo espera que el coronavirus ceda terreno para volver a ver su tierra. Mientras tanto saborea la natural felicidad de contar con alimento seguro por estas complicadas semanas.
No ir a bancos a pedir información
El Midis recordó a los beneficiarios del Bono 600 que no deben ir a las agencias bancarias a pedir informes sobre el bono ya que todos los detalles del mismo se encuentran en la plataforma bono600.gob.pe, en la cual podrán conocer la modalidad y la fecha de pago, y saber qué integrante del hogar es responsable del cobro. También se brinda información a través de la línea gratuita 101. “Ir en busca de información a los bancos es ponerse en riesgo de contagio de coronavirus”, advirtió el Midis.
Pago por medios virtuales
Los hogares que hayan confirmado en la plataforma ser beneficiarios del bono y que no son de Juntos, Pensión 65 o Contigo, podrán conocer desde el 26 de febrero, en la misma web, sus modalidades y fechas de pago, y qué integrante del hogar es responsable del cobro. Desde ese día se pagará a hogares que no son de los mencionados programas y que tienen cuenta bancaria o usan billetera digital (Yape, Tunki y BIM) o banca celular del Banco de la Nación.
Carritos pagadores
Los hogares de comunidades alejadas y sin entidades financieras recibirán el subsidio desde el 8 de marzo a través de “carritos pagadores” de empresas transportadoras de valores (ETV).
Finalmente, a partir del 29 de marzo cobrarán los hogares que no tienen cuenta bancaria ni teléfono celular identificado. Durante el proceso de pago, los ‘carritos pagadores’ de ETV llevarán el bono a los domicilios de las personas mayores de 80 años con discapacidad severa.
(FIN) NDP/LZD