Más de 100,000 estudiantes de educación básica de Lima Metropolitana se están preparando para el mercado laboral a través de un sistema de certificación múltiple, que incluye la formación técnica, informó el director de la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (Drelm), Luis Alberto Quintanilla.
Este esfuerzo forma parte del programa "Escuela de la Confianza”, impulsado por la Drelm, que busca que los escolares adquieran competencias validadas en áreas técnicas, digitales, artísticas, deportivas e inglés, garantizando su transición al mundo laboral o a la educación superior.
“Actualmente, solo tres de cada diez estudiantes logran transitar a la educación superior, sea tecnológica, artística, pedagógica o universitaria, mientras que siete quedan en el camino al no contar con herramientas necesarias para valerse por sí mismos. Esto genera graves problemas para el país, como la informalidad, la delincuencia y la baja productividad a nivel nacional”, comentó Quintanilla a la Agencia Andina.
Carrera técnica desde el colegio
De acuerdo con el director de la Drelm, en Lima Metropolitana, hay 106 carreras técnicas disponibles que se ofrecen a través de los Centros de Educación Técnico-Productiva (Cetpro) y las Instituciones de Educación Superior Tecnológica (IEST), destacándose las especialidades de gastronomía, panadería, textiles y mecánica.
En los Cetpro, los estudiantes completan dos módulos de formación técnica para obtener un título de auxiliar técnico, y pueden especializarse aún más para lograr un título de técnico profesional con dos módulos adicionales.
En el caso de los colegios que cuentan con Secundaria con Formación Técnica, los escolares pueden estudiar una carrera técnica en su misma escuela desde el primer año, dedicando ocho horas semanales a la especialidad que escogieron en el curso de Educación por el Trabajo.
Quintanilla señaló que, en este sistema, los alumnos obtienen certificados por cada módulo formativo, y al concluir la secundaria, reciben un certificado modular que puede ser convalidado en un Cetpro por un título de auxiliar técnico.
“Este modelo de formación técnica permite a los estudiantes integrarse rápidamente a la economía productiva, incluso antes de terminar la educación secundaria, brindándoles herramientas para conseguir empleo o crear sus propios emprendimientos”, agregó.
Además, quienes deciden continuar en la educación superior pueden convalidar sus estudios técnicos, reduciendo el tiempo de formación de tres años a dos o incluso año y medio. “De esta manera, la Drelm asegura el tránsito temprano de los estudiantes de la educación básica a la superior, contribuyendo también al aumento de la productividad nacional”.
Desde 2023, estudiantes de 501 instituciones educativas de nivel secundaria y 138 colegios de educación básica alternativa han iniciado sus estudios en los Cetpro, en horarios flexibles que no interrumpan sus clases escolares y cerca de su escuela o de sus hogares.
Certificación múltiple
Recientemente, también se realizó un curso piloto de ofimática empresarial con 1,600 alumnos de primaria, de los cuales más de 300 ya tienen una certificación con Microsoft.
En el ámbito artístico, 29 estudiantes han sido certificados en competencias musicales, tras concluir con éxito dos talleres especializados en Teoría y Lenguaje Musical e Interpretación de Guitarra en una reconocida universidad de Lima.
Asimismo, 79 escolares de cuarto y quinto año de secundaria están próximos a certificarse como promotores socio deportivos en colaboración con el Instituto Peruano del Deporte (IPD).
En el idioma inglés, 150 profesores de la capital ya han sido certificados según estándares europeos, mientras que otros 380 docentes, la mayoría de Educación Inicial, están en formación.
“Esperamos que, al final de este año, la mitad de ellos puedan lograr la certificación internacional. Y con estos maestros, para el 2025, vamos a empezar la enseñanza de inglés desde los tres años de edad en los colegios”, adelantó Quintanilla.
Por último, resaltó que la Drelm está trabajando para optimizar los recursos ya instalados, facilitando el acceso de los estudiantes a formación técnica de calidad en colegios y Cetpro, alineada con las demandas del mercado laboral y orientada a un futuro de trabajos formales.