Un equipo científico del Instituto Nacional de Investigación y Ecosistemas de Montaña (Inaigem), órgano adscrito al Ministerio del Ambiente, se encuentra en la Antártida, como parte de la expedición ANTAR XXVII, que investiga la dinámica glaciar, contaminación de ecosistemas y especies biológicas marinas y terrestres, a fin de proponer la aplicación de los resultados en la sostenibilidad ambiental y desarrollo social.
Dicha iniciativa denominada “Aporte social, económico y ambiental en la conservación y pérdida de la biodiversidad marina por el retroceso glaciar en la península Antártica” fue el proyecto ganador de Inaigem en la convocatoria nacional a finales del 2018 “Subproyectos de Investigación aplicada y desarrollo tecnológico”,
Esta convocatoria fue promovida por el Fondo Nacional de Desarrollo Científico, Tecnológico y de Innovación Tecnológica (Fondecyt) con fondos del Banco Mundial.
El proyecto es liderado y monitoreado por la presidenta ejecutiva del Inaigem, Gisella Orjeda, quien manifestó que el objetivo de este proyecto es conocer el impacto social, económico y ambiental del retroceso glaciar en la biodiversidad, para proponer medidas que conlleven a la sostenibilidad ambiental y desarrollo social en la Cordillera Blanca.
Es decir, los resultados del proyecto impactarán en políticas públicas en beneficio de los ciudadanos de nuestro país que viven en las montañas.
En esta expedición participa un equipo joven de investigadores de dicha institución conformado por Edwin Loarte (teledetección glaciología e hidrología), Mayra Mejía (restauración de ecosistemas y ecología glaciar), Katy Medina (teledetección y ecología glaciar) y los coinvestigadores del proyecto, Yuri Hooker y Adriana González.
Orjeda sostuvo que una vez culminado el proyecto de investigación, el Inaigem propondrá la aplicación de los resultados para la sostenibilidad ambiental y desarrollo social en beneficio de la población vulnerable por el cambio climático.
Cabe señalar que la participación de dicha institución en la expedición ANTAR XXVII cuenta con el respaldo del Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú y es la segunda expedición a la
Antártida, la primera se realizó en el 2019.
Las investigaciones serán desarrolladas por dos equipos: uno de ellos estará en el crucero a bordo del
BAP Carrasco (buque de investigación científica de la Marina de Guerra del Perú) en inmediaciones de la Isla Rey Jorge (península Antártica) donde se desarrollan estudios de fitoplancton, clorofila y sedimentos marinos, relacionados a la dinámica glaciar,
El segundo permanece en la Base científica peruana Macchu Picchu, ubicada en la ensenada Mckellar (Isla Rey Jorge) donde desarrollan estudios de biodiversidad marina y terrestre, así como fotogrametría terrestre en zonas glaciares.
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(FIN) NDP/ART
Publicado: 19/1/2020