Adrián Lara es un músico peruano radicado en Noruega desde hace 12 años. Trabaja con el Estado noruego en la difusión cultural y ha cantado en varios países de Europa. Su amor a la música siempre prevaleció en la toma final de sus decisiones. Es el llamado del corazón, nos dice enfático y feliz.
"En mi casa todos cantan", recuerda Adrián con nostalgia. En ese entorno familiar cargado de notas y armonías, fue el lugar donde la música se convirtió en una extensión de su alma.
Así que no sorprendió que se uniera con 10 años al Coro Nacional de Niños del Perú, ni tampoco que participará en los coros de todos los colegios que lo acogieron.
Ingresó a estudiar Filosofía en la Universidad Católica, aunque no pudo dejar de lado la música, especialmente con algunas presentaciones los fines de semana.
“Al final de los estudios de Filosofía, yo estaba en una crisis existencial porque la música estaba siempre llamando mi atención para un futuro profesional, hasta que llegó un momento en el que ya no me interesaba mucho realmente culminar los estudios”, evoca.
Durante su etapa en Perú, no estaba seguro de dedicarse a realizar una carrera musical, debido a su tipo de voz: contratenor, la voz masculina más aguda.
“Muchas veces recibí burlas, comentarios respecto al color de mi voz. Perú en ese entonces no estaba preparado para algo diferente. Hacer una carrera en Perú con esa voz hace 12 años, era impensado, ahora las cosas han cambiado mucho y hay mucha más apertura, interés por la novedad y las contradicciones”, confiesa.
Sin embargo, gracias a sus estudios de Filosofía pudo realizar un intercambio y estudiar en la Universidad de Oslo en Noruega. Solo sería un paso para dedicarse a lo que realmente quería.
Con la maleta cargada de esperanzas, emprendió el viaje hacia tierras noruegas.
“Salí también de Perú con la esperanza de convertirme en director de coro; tenía 24 años en ese entonces y estaba buscando un cambio en mi vida”, relata.
Adrián le hizo caso y siguió sin dudas el llamado de la música a su corazón. Así que con 25 años y mientras culminaba su carrera, integró el Coro Nacional de Jóvenes de Noruega durante dos años y se presentó en Eslovenia, Italia y el Reino Unido.
Formó parte del coro europeo “Tenso” durante dos años, representando a Noruega en giras por Italia, Países Bajos y Alemania.
Los amigos que logró con la música lo impulsaron a estudiar canto lírico en el Conservatorio Noruego de Música (NMH).
"Fui el primer peruano en ingresar a este conservatorio", afirma con merecido orgullo.
Posteriormente dirigió la agrupación musical barroca, Ensemble Wirakocha, dedicada al repertorio colonial iberoamericano, con la cual realizó diversas presentaciones en el país nórdico.
Profesor de español
Durante su proceso de adaptación aparecieron barreras económicas y culturales como el idioma. "Me tomó un año y medio dominar el idioma, y es un tiempo corto; trataba de estar con noruegos la mayor parte del tiempo, para poder aprender y adaptarme lo más rápido posible", nos dice.
Del mismo modo, nos comparte que mientras estudiaba en el conservatorio, brindó clases particulares de español y después enseñó el idioma en colegios secundarios noruegos.
"Al principio, mis ahorros eran escasos para los estándares del lugar", dice con modestia.
Ahora, con 36 años, Adrián espera acabar su maestría en Interpretación Musical en junio de este año. Es el primer estudiante que se dedica al repertorio afroperuano, en donde el arpa es fundamental en este repertorio.
Mochila Cultural
Como artista independiente, trabaja en el proyecto de la Mochila Cultural, un programa del Estado que envía artistas a distintas escuelas en Noruega para que los niños tengan un acercamiento a un repertorio, un tipo de música específico.
Junto a dos colegas, una noruega y un portugués, Lara forma parte del trío Tipp, tipp, tárara, ur!, una fusión de culturas y melodías que trasciende fronteras y tiempos.
"La idea es hacer música muy antigua para los niños", explica con entusiasmo, destacando el propósito de llevar la riqueza musical de Perú, Noruega y Portugal a las aulas noruegas.
Aunque toque para un público noruego ávido de lo desconocido, su corazón late con el anhelo de contribuir a su amada patria, proyectando su regreso a Perú como una oportunidad para enseñar y compartir su conocimiento con las generaciones futuras.
Lo veremos volver, mientras tanto hace patria en la fría Noruega.
Más datos:
-Adrián Lara está invitado al Festival de Música Antigua de Lima como arpista y cantante. Será la primera vez que se presente en su tierra natal.
-La Embajada del Perú en Noruega y la Academia Nacional de Música de Noruega co auspiciaron un concierto de música folclórica llamado "Huachi Torito", presentado por Adrián Lara, Camilo Pajuelo y Edgar Albitrez.
-El repertorio se centró en la imagen y la simbología del toro como elemento de la tradición cultural peruana, utilizando instrumentos regionales como el waqrapuku, el arpa andina, la tinya y el charango.