Desde los primeros días de vida el defecto cardiaco que tenía lo obligó a permanecer en tratamiento médico. Su madre Marieli nunca perdió las esperanzas.
Los diagnósticos de Transposición de Grandes Vasos (TGV), Estenosis Pulmonar (EP) y Comunicación Interventricular (CIV) ponían en peligro su vida, por lo que se convocó al equipo cardiovascular del INSN.
“El paciente no podía vivir con esta cardiopatía, es incompatible con la vida por lo que fue operado a la brevedad posible”, indicó el dr. Rafael Reyes Góngora, jefe del servicio, al referirse al sistema cardiovascular invertido.
Para llevar a cabo la cirugía se requirió de una técnica llamada Jatene o “Switch” arterial, que consiste en poner cada arteria en su sitio, de esta manera el ventrículo izquierdo queda conectado a la aorta y el ventrículo derecho a la pulmonar.
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En el proceso pre quirúrgico participó un equipo de cardiólogos que realizó un buen diagnóstico clínico, dejando en óptimas condiciones al paciente para la cirugía.
En la etapa intraoperatoria hicieron lo propio los cirujanos cardiovasculares, anestesiólogos y perfusionistas, y el equipo de intensivistas en el manejo posoperatorio.
Todos ellos compartiendo tareas con un gran equipo multidisciplinario conformado por enfermeras, tecnólogos médicos, químico farmacéuticos, técnicos de enfermería y personal administrativo encargado de la logística.
“Este ha sido un milagro”, indicó Marieli Cabanillas, madre del bebé, quien agradeció a Dios y al instituto, por hacer posible la recuperación del pequeño.
El tierno angelito cuenta con la cobertura del Seguro Integral de Salud (SIS) y su mejoría es una muestra del profesionalismo y experiencia del personal asistencial del INSN.
En los próximos días será dado de alta y retornará a su hogar en el distrito de Puente Piedra.
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