Alrededor de 6,000 estudiantes que ingresaron a la universidad de San Marcos en el último examen de admisión debieron empezar hoy sus clases, pero no pudieron hacerlo porque un grupo minoritario
en rechazo al inicio de los estudios generales, obligatorios precisamente para los cachimbos.
Los estudios generales
son cursos obligatorios que aquel que ingresa deberá llevar en los dos primeros semestres, tal como lo contemplan el estatuto de la
Decana de América y la Ley Universitaria 30220. San Marcos vuelve al dictado de estos cursos después de 40 años de haberse suspendido.
Los cachimbos llevarán los cursos según el área académica profesional donde se encuentre su carrera: ciencias de la salud; ciencias básicas; ingenierías; ciencias económicas y de gestión; así como humanidades, ciencias jurídicas y sociales. Por ejemplo, los que ingresaron a Medicina, Veterinaria, Enfermería, Nutrición y otros llevarán juntos los estudios generales todo este año.
Según explicó a la Agencia Andina la vicerrectora académica de Pregrado, Elizabeth Canales Aybar, el objetivo central de los estudios generales es la formación integral del profesional, es decir que tenga competencias técnicas que lo ubiquen en la realidad nacional y en el siglo XXI.
"Necesitamos profesionales que entiendan la realidad nacional en el aspecto social, político, económico y cultural, para que, según su formación técnica, puedan proponer opciones de solución a los problemas que aquejan al mundo y al país", refirió.
Dijo que, hasta el año pasado, los estudiantes llevaban directamente cursos de carrera y si bien se afianzaba una formación técnica de su especialidad, también se dejaban de lado las habilidades comunicativas, la responsabilidad social, la ética, el liderazgo y el idioma inglés.
"Hay ingenieros que no redactan bien o que no tienen mecanismos adecuados de comunicación. Pese a que lo necesitan, no tienen esas competencias y ello se nota en la redacción de las tesis".
Por eso dijo que, además de la enseñanza del inglés,
en los estudios generales los alumnos recibirán conocimientos de liderazgo, motivación hacia la investigación, habilidades comunicativas, ética, así como una contextualización de su carrera en el mundo actual.
De acuerdo con el nuevo estatuto de San Marcos, los estudiantes deben desarrollar obligatoriamente tres competencias: ubicación en el siglo XXI (contextualización), ubicación en la realidad nacional y fortalecimiento de su carrera (que esté seguro de lo que estudiará, para que en el futuro no migre a otra facultad).
"Buscamos profesionales que sean líderes y que no tengan miedo de emprender los cambios que el país necesita, y que entiendan por dónde va la orientación tecnológica en el mundo respecto de su propia carrera", puntualizó.
Canales Aybar manifestó que la
toma de la universidad es únicamente política, dado que la dirigencia de la federación quiere ganar el siguiente proceso electoral y necesita figurar y ganar adeptos.
Más en Andina:
(FIN) RRC/RRC