Familiares de las víctimas de la violencia durante la época de terrorismo defendieron hoy la continuidad del Lugar de la Memoria (LUM) y el derecho del Perú a recordar lo que se vivió para que no vuelva a ocurrir.
En conferencia de prensa, la secretaria adjunta de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), Ana María Vidal, consideró necesario evitar que continúen los ataques a la memoria del país.
“Es un derecho exigir justicia, verdad y memoria para que no se vuelva a repetir”, expresó.
Por su parte,
Gisela Ortiz, en representación de los deudos del
caso La Cantuta, sostuvo que durante más de 20 años los familiares han sido los principales interesados en que se sepa la verdad y lo que ocurrió con sus seres queridos desaparecidos.
“Actuamos ante la justicia para individualizar responsabilidades, no hemos generalizado. Reconocemos la práctica sistemática de violación a los derechos humanos y crímenes de Sendero Luminoso, el MRTA y agentes del Estado”, indicó.
Asimismo, consideró inaceptable que autoridades, como
congresistas o generales en retiro, los señalen como personas interesadas en desprestigiar a las Fuerzas Armadas, desconociendo el sacrificio de policías y militares.
“Creemos que el país no puede perder la oportunidad de defender la memoria de lo que vivimos. Levantamos nuestra voz frente a la campaña contra el Lugar de la Memoria y nuestra memoria en general”, agregó Ortiz.
En ese sentido, llamó a las autoridades a ser responsables de la defensa del LUM y de la memoria del Perú.
A su turno, Javier Roca, padre de un estudiante de la Universidad del Callao secuestrado en 1993, destacó la importancia de que el LUM continúe vigente, a fin de conocer la verdad en torno a la época de violencia.
Sin embargo, dijo apreciar intereses para evitar que las nuevas generaciones conozcan el sufrimiento del país en esa época.
(FIN) VVS/CCR
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Publicado: 22/5/2018