“Del nivel 9 hacia arriba, la radiación es alta y perjudicial para la salud; y cuando es más de 14, es extremadamente alta. Sin embargo, en el Perú se viene registrando niveles de 16 a 20 hace muchísimos años”, advirtió.
“Esto implicará un
riesgo mayor frente al
cáncer de piel en edades mucho más tempranas. Hablar de esta enfermedad hace cuarenta años era sinónimo de adultos mayores de 60 o 70 años, pero actualmente vemos un rango de aparición de la enfermedad de hasta los 50 años. La radiación solar no va a cambiar, seguirá penetrando la capa de ozono mucho más rápido y en niveles mucho más altos para la población”, advirtió.
A largo plazo, indicó, la exposición a toda radiación va a implicar, además del cáncer de piel,
otros problemas dermatológicos incluso en jóvenes, como la aparición de pecas, manchas, el envejecimiento prematuro de la piel, deshidratación y/o pérdida de la firmeza. También recordó que hay reflectores de la radiación como el agua, la arena, el pasto, el asfalto, y que hay superficies como el vidrio que permiten ingresar a la radiación.
Cómo prevenir los efectos de la radiación
La Liga contra el Cáncer, como parte de su labor educadora y sensibilizadora, facilita a la población las directrices necesarias para el cuidado de la piel a largo plazo. “
Es más barato y eficaz invertir en prevención que pagar tratamientos de cáncer. Es fundamental seguir las recomendaciones porque una no reemplaza a la otra, todas son importantes y son una secuencia de pasos que se tiene que hacer en general todos los días del año”, aseguró la experta.
En primer lugar, tenemos que evitar salir y exponernos de manera directa al Sol en los
horarios extremos de radiación que van desde las 10:00 hasta las 15:00 horas. Sin embargo, ¿qué pasa con quiénes laboran en delivery, los policías, los obreros de construcción civil y los vendedores, entre otros que pasan muchas horas en la vía pública?
Es prioritario -aconseja- el
uso de bloqueador solar, incluso debajo de las prendas de vestir, las cuales deben ser lo más largas posibles para proteger la mayor parte de la superficie de la piel; también es importante
usar sombreros de ala ancha para proteger las zonas altamente expuestas (cuello, orejas y rostro) y, de ser posible,
usar una sombrilla.
“El Instituto Nacional de Cáncer reporta que la ropa mojada permite mucho mayor penetración de la radiación que la ropa seca. La ropa a usar debe ser de algodón y holgada, de colores intermedios a oscuros, y se debe evitar el material sintético porque tiende a inducir más el calor, por ende la transpiración es mayor y la deshidratación también es mucho más rápida”, informó la especialista.
Otra medida importante es usar lentes de sol, sostiene, para evitar que la retina también sea afectada por la radiación solar y produzca quemaduras o la aparición de cataratas en los ojos. Los lentes deben ser adquiridos en un lugar de garantía y no en un ambulante porque no hay cómo saber si realmente tiene un filtro para proteger la retina.
Finalmente, la licenciada recomienda la
hidratación mediante agua y el
consumo de frutas y verduras de estación, que también ofrecen antioxidantes y son un factor protector del cáncer a largo plazo.
Asimismo, advirtió que existe un tipo de cáncer de piel mucho más agresivo que los demás y es el
melanoma; el melanoma acral aparece en zonas distales como palma de manos, palma de pies, debajo de las uñas, entre otras. Toda peca, mancha, lunar que pica, que crece, que se descama, que cambia de color, que mide más de medio centímetro es importante que pase por
una evaluación una vez al año.
Bloqueador solar
Precisó la importancia de aplicar el bloqueador solar media hora antes de empezar las labores para que el producto pueda ser absorbido y brinde protección. Asimismo, esa aplicación debe renovarse como máximo cada 2 horas en caso de estar en la calle, y cada 3 o 4 horas como máximo en caso de estar en casa.
“La cantidad promedio que se sugiere para cada aplicación en una zona determinada es aproximadamente de 5 gramos, que corresponde a un equivalente del dedo medio hacia la base de la mano. Se debe distribuir adecuadamente en la mano y aplicar de manera homogénea y en movimientos circulares en cada zona corporal”.
- Un lugar de garantía. El lugar más recomendable es una farmacia, mientras que un comercio ambulatorio fuera del mercado o al borde de la playa es lo más riesgoso. Además el bloqueador necesariamente debe estar almacenado en un ambiente fresco. “En la playa, donde el producto está expuesto al Sol más de 6 horas continuas todos los días, donde la temperatura es más de 30 grados, ese producto probablemente no esté óptimo para ser usado y nada me garantiza que, al aplicarlo, me protegerá la piel”.
- No usar productos vencidos. Hay que tener en cuenta la fecha de vencimiento independientemente de la marca o establecimiento. Algunos indican una fecha específica y otros tienen un plazo de vencimiento de 6 o 12 meses después de ser abierto.
- Verificar el factor de FPS. Debe ser necesariamente mayor de 30 FPS.
- Presentación más adecuada. La presentación puede ser en gel, crema, aerosol, etc., y la determina cada persona según su tipo de piel o su comodidad, salvo quienes tengan un problema dermatológico previo y requieran un bloqueador medicado por su dermatólogo.
Finalmente, la experta recordó que la Liga contra el Cáncer trabaja desde hace más de 70 años en educar y sensibilizar a la población sobre la prevención de todo tipo de cáncer, por lo que invita a la población a hacerse sus chequeos preventivos.
Esto puede hacerse a través de su plataforma digital en la
página web de la Liga contra el Cáncer o llamando a la central telefónica (01) 204 0404, donde se orienta al paciente y se le ayuda a agendar una cita en el centro de prevención en Pueblo Libre o en Lima.