El congresista Guillermo Bocángel, rechazó el informe de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales que recomienda su destitución, al señalar que este carece del sustento necesario que lleve a despojarlo del cargo obtenido por la voluntad popular.
Durante su intervención en el Pleno del
Congreso, el legislador indicó que en sus declaraciones registradas en la grabación hecha por el congresista Moisés
Mamani (Fuerza Popular), no hubo ninguna
infracción constitucional, o delitos que hayan sido probados.
“Deben debatirse los hechos probados y no los creados de manera forzada”, expresó Bocángel.
En tal sentido, mencionó que se le acusa directamente de prebendas, teniendo como prueba el video grabado por Mamani. Sin embargo, dijo que en ningún momento se le escucha hacer ofrecimientos probados de obras a cambio de votos de los parlamentarios para rechazar la vacancia presidencial.
“Se me menciona (
en la acusación) mi acercamiento al Gobierno, pero hemos recorrido muchos lugares y hemos interactuado con diversos alcaldes, eso no es tráfico de influencias”, dijo el parlamentario.
Bocángel sostuvo que la reunión privada, que fue grabada por Mamani sin consentimiento y difundida -en su criterio- de manera ilegal, solo duró 10 minutos, y tuvo carácter político, lo cual “hoy se quiere judicializar”.
“Dicen que habría inaugurado obras de la mano con PPK. Que me señalen una sola obra o con un ministro. Se me imputa como hecho específico
el tráfico de influencias. Jamás hice un viaje con el expresidente, jamás”, subrayó el congresista renunciante a Fuerza Popular.
Guillermo Bocángel dijo, además, que en este tema la verdad debe salir a la luz, y que la Fiscalía y luego el Poder Judicial tendrán que ver si los legisladores acusados incurrieron o no, en el delito de tráfico de influencias.
(FIN) JCR/MVF
JRA
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Publicado: 6/6/2018