Por Susana MendozaDon Ricardo Palma, escritor y conocido como el “bibliotecario mendigo” por su afán de recuperar libros que la Biblioteca Nacional del Perú (BNP) perdió en la devastadora Guerra del Pacífico, no imaginó que un siglo después de su muerte muchas personas reemplazarían los libros físicos por los “virtuales” y que la biblioteca podría ser también un espacio para toda la familia.
Hoy en el siglo XXI los niños, adolescentes y jóvenes usan internet y herramientas digitales para estar a un clic de la información que les interesa. Es una preocupación para el escritor y jefe institucional de la Biblioteca Nacional del Perú (BNP), Boris Espezúa, pero al mismo tiempo una gran oportunidad para que las bibliotecas busquen ser atractivas.
En diálogo con la agencia Andina, sostiene que los bibliotecarios y bibliotecólogos enfrentan actualmente el desafío de mostrar que las bibliotecas son más que libros en anaqueles.
Son también espacios donde se promueve la cultura del distrito, la provincia y la comunidad, asegura. "Se crea, se brindan cursos, capacitaciones, se hacen conversatorios, entre otras actividades planificadas, para recuperar en cada familia peruana la pasión por la lectura".
Jefe institucional de la BNP, Boris Espezúa, apuesta por la creación de Estaciones de Bibliotecas Públicas.
Espezúa conduce la BNP con la convicción de que la institución cumple una labor estrictamente cultural, apegada al conocimiento y al compromiso de desarrollar, gracias a la lectura, las capacidades de cada ciudadano desde la infancia.
“La lectura nos da facilidad de palabra, de vocalizar mejor el lenguaje y formar conciencia crítica. Leer debería ser un derecho y el Estado viene trabajando en ello”, comenta.
Descentralización
Espezúa nació en la provincia de Juli, Puno, y por experiencia propia sabe que los niños, escolares y jóvenes de educación superior aún tienen limitaciones para gozar de libros físicos y virtuales que estimulen su curiosidad y pensamiento crítico.
Reconoce, por eso, que el desinterés de los chicos por la lectura es una amenaza que es necesario controlar. Como Estado,
la BNP está implementando lo que ha denominado Estaciones de Biblioteca Pública, justamente para llevar los servicios que ofrece a los lugares del país donde no existen bibliotecas.
Tacna ya cuenta con la primera Estación de Biblioteca Pública en Tarata.
Las Estaciones de Biblioteca Pública se ubican en zonas “adversas”, es decir, en lugares en donde las familias no tienen cerca una biblioteca municipal ni alternativas culturales para mejorar sus condiciones de vida pues se dedican a actividades que les demanda muchas horas fuera de su casa.
En estos momentos
funcionan en los distritos limeños de La Victoria, Comas, El Agustino, Breña y Rímac, y en las provincias de Cutervo (Cajamarca), Ica y
Tarata (Tacna).
La Estación de Biblioteca Pública de La Victoria, “Carmen Checa de Silva” funciona en el Parque San Germán S/N, altura de la cuadra 13 de la Av. México, a 2 cuadras de Gamarra.
Estos espacios ofrecen libros y recreación para niños, niñas, adolescentes y, por ende, a las familias. Sin embargo, a pesar de que esta experiencia puede ser un referente a seguir en otras municipalidades distritales y provinciales, no lo es aún porque los alcaldes no les dan importancia a las bibliotecas, precisa el jefe institucional.
A pesar de que la Ley de Municipalidades establece que las comunas deben promover la cultura en sus ámbitos, las autoridades no están comprometidas. "Eso tiene que cambiar", subraya.
Estación de Biblioteca Pública de Comas.
Para crear las Estaciones de Biblioteca Pública, es necesario que la BNP y las municipalidades firmen un convenio; el gobierno local es responsable de ceder la infraestructura.
En ella, la BNP implementa todos sus servicios, como lectura de libros para niños, internet, audio libros, productos digitales, entre otros.
Servicios digitales
La BNP continúa adecuándose al uso de nuevas tecnologías, a la que suma la inteligencia artificial, con productos digitales. Entre los servicios gratuitos digitales que ofrece se encuentran el
material bibliográfico documental digitalizado de su Fondo Antiguo y la Biblioteca Pública Digital.
Esta última reúne 5,800 títulos contemporáneos en castellano, sobre diversos temas, en diferentes formatos (electrónicos y audiolibros de publicación contemporánea y dominio público).
Pueden usar esa plataforma, peruanos y peruanas desde cualquier parte del país y el mundo, con su DNI, así como extranjeros residentes en el Perú.
Día del Bibliotecario Peruano
En noviembre de 1968 el entonces presidente Fernando Belaunde Terry promulgó la
Ley N°16801, que establece oficialmente el 14 de noviembre como fecha para conmemorar el Día del Bibliotecario Peruano.
Antes, el historiador Jorge Basadre Grohmann fundó la Escuela Nacional de Bibliotecarios, en 1944, y se encargó de reconstruir la Biblioteca Nacional del Perú tras el incendio que la consumió en 1943.
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Published: 11/14/2023