El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, denunció hoy el "uso desproporcionado de la fuerza" por parte de los organismos de seguridad de Venezuela y de individuos que apoyan al Gobierno de Nicolás Maduro tras su nueva reelección en comicios que están siendo contestados dentro y fuera del país.
La oficina de Türk ha recibido reportes sobre el uso excesivo de la fuerza contra manifestantes y de que en estos hechos han participado los llamados "colectivos", en referencia a grupos civiles armados próximos al aparato estatal.
"Varios manifestantes han sido heridos con armas de fuego, con una muerte confirmada el 29 de julio, aunque hay más denuncias que están pendientes de verificación", indicó en un comunicado circulado en Ginebra.
Tras pedir que se sancione a los autores de tales hechos, el alto comisionado urgió a las autoridades venezolanas a respetar el derechos de los venezolanos a reunirse, a protestar de forma pacífica y a expresar sus puntos de vista libremente y sin miedo.
En ese sentido, pidió que la disputa electoral se resuelva de forma pacífica, con transparencia y que se publiquen oportunamente los resultados de cada colegio electoral, para lo cual "las autoridades electorales deben realizar su trabajo de forma independiente y sin interferencias".
Según la organización no gubernamental Foro Penal, seis personas murieron el lunes en los enfrentamientos entre partidarios de Maduro y opositores.
Por parte del gobierno, el fiscal general Tarek William Saab ha informado de 749 personas detenidas en las numerosas protestas registradas en 17 de los 24 estados del país.
La oposición ha llamado a protestar contra un posible fraude, ya que afirma tener más del 40 % de las actas del proceso, en las que el ganador habría sido el candidato Edmundo González Urrutia.
Varios gobiernos han reclamado un recuento de los votos en condiciones de transparencia y algunos de ellos se niegan a reconocer la reelección de Maduro.