Investigación arqueológica devela pasado monumental de Cerro Malabrigo en valle de Chicama

Una investigación realizada en el sitio arqueológico Cerro Malabrigo, ubicado en el Valle de Chicama, región La Libertad, revela la existencia de una arquitectura monumental entre los años 176 y 50 a.C., mucho antes del surgimiento de la cultura Moche. Foto: Cortesía/ Programa Arqueológico Chicama

Una investigación realizada en el sitio arqueológico Cerro Malabrigo, ubicado en el Valle de Chicama, región La Libertad, revela la existencia de una arquitectura monumental entre los años 176 y 50 a.C., mucho antes del surgimiento de la cultura Moche. Foto: Cortesía/ Programa Arqueológico Chicama

14:39 | Lima, jul. 23.

Por Moisés Aylas Ortiz

Una investigación realizada en el sitio arqueológico Cerro Malabrigo, ubicado en el Valle de Chicama, región La Libertad, revela la existencia de una arquitectura monumental edificada a principios del periodo intermedio temprano, entre los siglos II a.C. y I d.C., mucho antes del surgimiento de la cultura Mochica. Este sitio es ahora reconocido como un hito crucial en la arqueología peruana.


La Agencia Andina conversó con Carito Tavera, investigadora y codirectora del Programa Arqueológico Chicama y una de las autoras del artículo "Cerro Malabrigo y el surgimiento de la arquitectura monumental prehispánica en el Valle de Chicama, costa norte del Perú", publicado en el Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino, que resume este importante trabajo de investigación resultado de una valiosa colaboración internacional e intergeneracional entre el Programa Arqueológico Chicama de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y la Universidad del Sur de Florida.



Un centro político y económico de corta duración


Tavera explica que las investigaciones en el sitio arqueológico Cerro Malabrigo han logrado por primera vez fechar con precisión la construcción monumental en el sector norte del Valle de Chicama. Los análisis radiocarbónicos indican que Cerro Malabrigo fue ocupado entre el 176 y el 50 antes de Cristo (a.C.), un periodo sorprendentemente corto en comparación con otras civilizaciones andinas. “Esta datación es crucial, ya que establece que Malabrigo es pre-Moche, desafiando antiguas hipótesis que lo vinculaban con culturas como Cupisnique o Chavín”, subrayó.



La arquitectura de Cerro Malabrigo, compuesta por una sucesión de tres plazas monumentales y una serie de aproximadamente 120 almacenes en la parte trasera, sugiere que el sitio funcionó como un centro político y económico vital para las poblaciones costeras y agrícolas del valle. "Es el primer trabajo que nos muestra el momento exacto en que se da el surgimiento de espacios monumentales capaces de cohesionar a las poblaciones", explicó la arqueóloga sanmarquina.

<

Un paisaje de cohesión y coerción


La ubicación estratégica de Cerro Malabrigo, al pie del acantilado de la playa Malabrigo (Puerto Chicama), conocida por sus olas ideales para el surf, no es casual. Desde el sitio, se ejercía un control visual sobre la bahía, regulando el acceso a recursos marinos. La presencia de depósitos con evidencias de recursos marinos (cangrejos, langostinos, peces, toyo) y agrícolas (cestas que contenían productos botánicos), apoya la hipótesis de que este espacio monumental funcionaba como un gran mercado o centro de intercambio.


Tavera afirma que la arquitectura refleja un "paisaje tanto de cohesión como de coerción", donde el ritual y la monumentalidad eran medios para consolidar el poder de las élites locales. La construcción de un proyecto de esta magnitud requirió una colaboración significativa entre las poblaciones, un claro signo de cohesión social, aunque la arquitectura también pudo haber restringido el acceso a ciertos recursos, denotando coerción.

Técnicas constructivas únicas y un destino incierto


Sostiene que Cerro Malabrigo se distingue por sus técnicas constructivas, empleando piedra canteada con barro y la inusual presencia de adobes semiesféricos. Esta combinación arquitectónica es muy local y particular de Malabrigo, no habiéndose registrado en otros asentamientos contemporáneos en el valle, que en su mayoría eran aldeas de carácter doméstico. Esto sugiere una tradición arquitectónica única para esta población costera.


A pesar de su magnificencia, lo que intriga a los investigadores es que el proyecto monumental de Malabrigo decayó en un periodo relativamente corto. Aunque no hay evidencias claras de un colapso natural, los investigadores sugieren que la élite pudo haberse debilitado o no haber logrado mantener su influencia política. Este "primer ensayo político-social" de gran escala dio paso a un vacío de monumentalidad en el valle, hasta el surgimiento de los Moche siglos después”, aseveró.

Nueva etapa de investigación en Chicama


Este año el Programa Arqueológico Chicama continúa sus investigaciones en el litoral. Actualmente, el equipo se encuentra excavando en Puémape, otro templo formativo situado en el Valle de Chicama, con el objetivo de comprender las tecnologías andinas y cómo las poblaciones costeras se adaptaron y desarrollaron en estas áreas. Próximamente, también se realizarán excavaciones en Licapa II, un sitio Mochica.


La historia de Cerro Malabrigo, una civilización costera con una identidad y arquitectura propias, es un testimonio de la diversidad y complejidad de las organizaciones políticas prehispánicas en Perú. Sus misterios, como la razón de su breve existencia, aún esperan ser descifrados con futuras investigaciones, prometiendo más revelaciones sobre este fascinante capítulo de nuestra historia ancestral.

Más en Andina:

(FIN) MAO

Publicado: 23/7/2025