19:35 | San Martín, ago. 14.
La región San Martín enfrenta un creciente estrés hídrico que amenaza con empeorar en los próximos años, según advierten representantes de la Autoridad Local del Agua (ALA). Estudios indican que para el año 2040 el problema podría agravarse debido a la descontrolada tala de árboles en la cabecera de los ríos, poniendo en grave y serio riesgo el suministro de agua por la cual muchas familias salen a buscar manantiales para abastecerse.
Así lo dio a conocer Hugo Anteparra Reátegui, periodista de investigación con más de 28 años de experiencia laboral especializado en política regional y asuntos socio ambientales en el reportaje presentado durante el curso “Periodismo ambiental en entornos digitales”, el cual fue desarrollado por la Pontificia Universidad Católica del Perú 8PUCP) y la iniciativa Unidos por los Bosques de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible (FCDS – Perú).
Anteparra Reátegui manifiesta que entre septiembre y noviembre del 2023, aproximadamente 360 mil habitantes de los distritos de Tarapoto, Morales y la Banda de Shilcayo, jurisdicción de la provincia de San Martín; se vieron afectados por la falta de agua potable.
Las familias perjudicadas se vieron obligadas a buscar el líquido elemento en manantiales y ojos de agua para cubrir sus necesidades básicas, una situación sin precedentes en la región, que generó la preocupación de especialistas en el tema.
Añadió que al consultar sobre esta problemática a la gerente de la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Emapa)-San Martín, Margoth Vásquez Panduro, la funcionaria refirió que las captaciones de agua se estaban secando, motivo por el cual solo se esperaba con ansiedad la caída de lluvias. Ante este contexto, la población estaba angustiada ya que las altas temperaturas que superaban los 38 grados centígrados complicaba aún más el escenario.
El periodista sostuvo que el biólogo Froy Torres Delgado, jefe de la Autoridad Local del Agua (ALA), atribuyó el aumento del estrés hídrico a los efectos del cambio climático, que están alterando el ciclo hídrico y reduciendo los caudales de los ríos.
Adicionalmente, Quinto Inuma Alvarado, líder indígena de la comunidad de Santa Rosillo de Yanayacu, un año antes de ser asesinado alertó sobre la tala de árboles en la Cordillera Azul, poniendo en peligro la principal fuente de agua de la Reserva Nacional Pacaya Samira.
Javier Noriega Murrieta, jefe zonal de la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass)–Tarapoto, explicó que la deforestación estaba teniendo un impacto significativo, ya que la falta de árboles en la cabecera de los ríos provocaba la erosión del suelo y la contaminación de los reservorios, lo que obligaba a restringir constantemente el suministro de agua.
Milton Ruíz Vásquez, catedrático de la Universidad Nacional de San Martín, recomendó a las autoridades forestales tomar medidas inmediatas. “Mediante la plataforma Geobosques, gestionada por el Ministerio del Ambiente, que monitorea los cambios sobre la cobertura de las florestas, se ha registrado actividades de tala en la zona de amortiguamiento de la Cordillera Escalera; sin embargo, no se ha informado sobre las acciones tomadas por las autoridades para detener esta actividad”.
El periodista Anteparra Reátegui recordó que la escasez de agua en la ciudad de Tarapoto, en ese entonces, generó impactos económicos significativos tanto para empresas como para familias.
Edwin Puerta Castañeda, gerente del Hotel Boca Ratón, compartió su preocupación por el aumento de la tarifa del servicio de agua potable que perjudicó directamente el funcionamiento del alojamiento. Este escenario ha llevado a algunas empresas proveedoras de agua en camiones cisternas a aumentar considerablemente su importe por el servicio de 2,500 galones, pues cobraban hasta S/800, siendo el precio normal de S/250, lo que representa un aumento exorbitante en los costos operativos”, detalló.
Ante esta crisis ocurrido el año pasado, equipos técnicos de Emapa San Martín y del Colegio de Ingenieros – Consejo Regional San Martín se reunieron de emergencia para buscar soluciones y alternativas, identificando tres manantiales en los distritos afectados que podrían servir como reserva para enfrentar futuros déficits hídricos.
El periodista de investigación concluyó su reportaje resaltando que en los últimos años se ha observado una disminución preocupante en el caudal de los afluentes que se originan en Cordillera Escalera, según explicación de Iván Rojas García, presidente del Comité de Gestión de la Microcuenca del Cumbaza, que pormenoriza la disminución del 32% del cauce del río mencionado, lo que ha generado una creciente preocupación entre las autoridades locales y regionales, situación que es un indicador que el estrés hídrico comenzó en la región San Martín.
Dato:
El estrés hídrico hace referencia a la situación que se da cuando la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación uy la Agricultura (FAO), un estrés hídrico elevado puede tener consecuencias devastadoras para el medioambiente y dificultar (e incluso revertir) el desarrollo económico.
Más en Andina:
(FIN) JQC/TMC
Publicado: 14/8/2024