Andina

Turismo de aventura: déjate cautivar por estos 5 bosques de piedra del Perú

Obras de la naturaleza se encuentran en las regiones de Cajamarca, Pasco, Apurímac, Arequipa y Lima

Cada bosque posee una historia fascinante. Algunos se formaron por la deglaciación y otros por depósitos de material volcánico. Foto: Difusión

Cada bosque posee una historia fascinante. Algunos se formaron por la deglaciación y otros por depósitos de material volcánico. Foto: Difusión

05:15 | Lima, jun. 9.

El turismo de aventura es una de las tantas alternativas que ofrece la geografía peruana. Las montañas y los bosques hacen posible que los visitantes puedan conocer la naturaleza por medio de esta actividad no masiva y que brinda garantías de seguridad para la salud del turista, informó el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur).

Los bosques de piedra son atractivos turísticos que se pueden visitar para desarrollar estas actividades. Perú cuenta con 68, lo cual lo convierte en el país con la mayor cantidad de estos en la región.

Cada bosque posee una historia cautivante y deja que el visitante perciba figuras en sus formaciones. Algunos se formaron por la deglaciación y otros por depósitos de material volcánico. El Mincetur ofrece cinco opciones ubicadas en las regiones de Pasco, Cajamarca, Arequipa, Lima y Apurímac.

Huayllay


Es uno de los bosques de piedra más altos del Perú y el mundo. A 43 kilómetros al sur de Cerro de Pasco, el Santuario Nacional de Huayllay posee una de las colecciones de piedra más impresionantes del país. Además, se calcula que alberga más de 500 pinturas rupestres.

El conjunto tiene rocas que se han formado por el viento. Cada una posee formas de personas y animales que aparecen y desaparecen según la posición de donde se les mire. La fauna local y los restos arqueológicos también son parte de su atractivo; entre sus huéspedes figuran venados, vicuñas, zorros y gatos monteses.

Cumbemayo


El atractivo principal del complejo arqueológico de Cumbermayo son las formaciones rocosas. Ubicado a 19 kilómetros de la ciudad de Cajamarca, se le conoce localmente como Los Frailones, debido a que la forma de las rocas se asemeja a un grupo de frailes.

Fue el lugar ceremonial de culto hacia el agua, por lo cual se encuentran acueductos de la época inca y petroglifos. En este atractivo se hacen recorridos por las cuevas y los desfiladeros. Además, es el lugar que los visitantes escogen para participar en la limpieza de energías.

Imata


El bosque de piedras de Imata se encuentra a 140 kilómetros de la ciudad de Arequipa, en la provincia de Caylloma, y el viaje puede tomar hasta tres horas.

Este lugar es ideal para el turismo de aventura, debido al terreno accidentado, la altura y los diferentes recorridos que ofrece. La zona también posee otros atractivos turísticos como las cataratas de Pillones y se recomienda visitar la zona en agosto.

Marcahuasi


Esta meseta de origen volcánico está a más de 4,000 metros sobre el nivel del mar, en la provincia limeña de Huarochirí. El acceso es desde el poblado de San Pedro de Casta, al cual se llega por un desvío a la altura del kilómetro 35 de la carretera Central. Desde aquí existen dos caminos para llegar a Marcahuasi, uno de cuatro horas y otro que toma la mitad del tiempo.

Marcahuasi permite que los turistas acampen y pasar la noche rodeado de las rocas es parte de su atractivo. Es conocido por su cielo, que permite apreciar las constelaciones en las noches despejadas.

Pampachiri


A 130 kilómetros de la ciudad apurimeña de Andahuaylas, a cuatro horas en auto, se extienden las formaciones de Pampachiri. Estas rocas en forma de coníferas y hongos se iniciaron hace aproximadamente 4 millones de años, debido al depósito de materiales de los volcanes Qarwarasu y Sotaya.

Entre sus atractivos figuran los colores que puede generar y es que las rocas tienen una gran cantidad de cuarzo que, con la luz solar, puede reflejar luces con tonos anaranjados intensos. En agosto, cuando el cielo está más despejado, se puede apreciar en su máximo esplendor el firmamento.

Los habitantes de Pampachiri construyeron sus viviendas debajo de las rocas, las cuales usan como techos. Por ello, se le conoce también como “La casa de los Pitufos”.

Más en Andina:

(FIN ) NDP/LIQ/JOT

Publicado: 9/6/2020