El racismo es una amenaza para nuestra interculturalidad y tiene que considerarse un problema público que le impide a la población peruana valorar esa diversidad que la define y desarrollarse como sociedad, manifestaron voceros del Ministerio de Cultura.
El racismo se detiene en aquellas diferencias imposibles de cambiar como la forma de hablar o el tipo de cabello, por ejemplo, por eso se necesita de una respuesta colectiva para evitarlo y prevenirlo. La manera de lograrlo es reconociendo que es un problema público, explicó el director de Diversidad Cultural y Eliminación de la Discriminación Racial de dicho portafolio, Gustavo Oré.
En diálogo con la agencia Andina, el funcionario precisó que, como problema público, el racismo se erradicará con el concurso de toda la población. El Perú alberga en su territorio a 55 pueblos indígenas, 48 lenguas originarias y una variedad de cosmovisiones, indicó.
“El racismo puede afectar de manera individual a las personas, pero s
i todavía se cree que nuestra diversidad cultural es un problema, como país nos daña y retrasa. Eso tiene que desaparecer porque le hace sentir vergüenza a la gente de lo que es, y afecta la autoestima colectiva.
La interculturalidad es una riqueza que ya no puede seguir siendo vista como una dificultad”, comentó.
Proyecto de Ley
El Poder Ejecutivo planteó abordar el racismo como un problema público que afecta la vida cotidiana de las personas, a través del proyecto de Ley de Promoción de la diversidad cultural para la prevención y sanción del racismo y la discriminación étnico-racial que remitió al Congreso de la República recientemente.
El proyecto de Ley, agregó Oré, establece que el Estado integre y articule, con una visión de valoración positiva de la diversidad, sus acciones entre los distintos sectores y diferentes niveles de gobierno cultural, y con la ciudadanía para que la prevención y la sanción contra el racismo sean más eficientes.
“De aprobarse el proyecto de Ley que reconoce el racismo como un problema público empezarán a reducirse las brechas sociales que afectan con mayor énfasis a las poblaciones indígenas y afroperuanas, históricamente discriminadas”, señaló.
Asimismo, los servicios que ofrece el Estado (centros de salud, comisarías y municipalidades) se adaptarán a la realidad cultural de las diferentes regiones del país, agregó.
Además la regulación relacionada con prevención y sanción, mejorará, precisó. Hoy en día cuando se denuncia un hecho de discriminación, el proceso para llegar a la sanción es largo, no hay gradualidad pues no se considera la peculiaridad de cada caso. "La sanción tiene que ser más eficaz", dijo.
Racismo y covid-19
Para Oré la pandemia ha revelado que el Perú aún es un país donde existen muchas diferencias. Por ejemplo, indicó, la salud no es igual para todos. Todavía es necesario traducir los mensajes a lenguas originarias y no se reconoce que el aislamiento social no es igual en una ciudad que en una comunidad rural.
"La visión de las políticas aún es centralista. Por eso fue necesario crear el comando covid-19"
De aprobarse el proyecto sería la primera Ley contra el racismo en el Perú, manifestó Oré.
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(FIN) SMS/LIT
JRA
Publicado: 5/7/2020