En esta entrevista, la presidenta de la Escuela Nacional de Administración Pública (ENAP) de Brasil, Betania Lemos, analiza el impacto del enfoque de género en la administración pública y del uso de la inteligencia artificial en los servicios que brinda el Estado.
¿Es importante formar a los servidores públicos en enfoque de género?
La Escuela Nacional de Administración Pública (ENAP) es responsable de capacitar a los servidores públicos del sector Ejecutivo, que abarca el gobierno central, regional y municipal. Desde el año pasado, contamos con el Programa de Formación de Iniciativa Feminista, que tiene tres ejes principales: liderazgo, con un enfoque especial para mujeres afrodescendientes.
–¿Por qué razón?
Porque en nuestro país el racismo sigue siendo un problema profundo, y por eso queremos priorizarlas. El segundo eje está enfocado en áreas poco tradicionales para las mujeres, como la tecnología de la información, con el objetivo de que ocupen espacios generalmente dominados por los hombres. El tercer eje es la educación, donde formamos tanto a hombres como a mujeres en el respeto y la inclusión de otras diversidades, como la diversidad de género.
–¿Han enfrentado oposición?
Nuestro objetivo es que los servidores públicos comprendan, con base en evidencia científica, que una sociedad más diversa y una burocracia que represente a todos los grupos de la población son mejores para el país. Esto impacta positivamente en el diseño de políticas públicas.
–¿Cuál es el principal cambio que produce la presencia de mujeres en puestos directivos?
El cambio principal es que las mujeres tienen una mayor capacidad para diseñar políticas específicas dirigidas a poblaciones específicas. En Brasil, por ejemplo, las mujeres representan más de la mitad de la población. Un hombre, al no experimentar las vivencias de las mujeres, no está en condiciones de planificar medidas a favor de nosotras, aunque tenga buenas intenciones. Por eso aseguramos la inclusión del enfoque de género en las políticas públicas.
–Pero existen autoridades femeninas que son conservadoras…
Eso es cierto. Sin embargo, independientemente de sus tendencias ideológicas, las mujeres suelen ponerse de acuerdo en ciertos temas clave. Por ejemplo, en Brasil logramos aprobar una ley que garantiza a las adolescentes en situación de extrema pobreza el acceso gratuito a toallas higiénicas y tampones durante su menstruación. Estos productos tienen un costo elevado, y muchas jóvenes faltaban a la escuela porque no podían comprarlos. ¿Qué hombre pensaría en esto como un problema urgente?
–A pesar de las diferencias, ¿qué temas relacionados con mejorar la situación de la mujer tienen consenso?
Existe un consenso sobre la necesidad de políticas contra la violencia hacia las mujeres, el acoso sexual, las barreras de acceso al empleo y la desigualdad salarial. Estos son temas comunes para nosotras. En cuanto a la gestión, cuando se trata de decidir qué parte del presupuesto se destinará a abordar estos problemas, las mujeres en espacios de poder suelen asignar un porcentaje significativo. Esto contrasta con las prioridades de muchos varones, que a menudo enfocan los recursos en otras áreas. Con más mujeres en los puestos directivos del Estado, se toman decisiones que mejoran la sociedad.
Meritocracia
–Sin embargo, en muchos países todavía no se valora la meritocracia…
En Brasil tenemos una realidad distinta. En nuestro país, los puestos de confianza tienen requisitos específicos; no es posible ingresar al Estado sin cumplirlos. Si alguien desea trabajar como funcionario, debe pasar por un concurso. La mayoría de los servidores ingresa de esta manera, y muchos trabajan durante varios gobiernos [...]. Tenemos claro que la ejecución de las políticas depende de los funcionarios, de los servidores públicos. Por eso es fundamental invertir en su capacitación. Somos quienes atendemos las demandas de la población.
–¿Con qué argumento se puede convencer de que el servicio civil es útil?
Las personas deben saber que los gobiernos diseñan políticas para la población, pero son los servidores públicos quienes las ejecutan. Por ejemplo, cuando una persona acude a un hospital para ser atendida por un médico, una enfermera o personal técnico, detrás de esa atención hay un gobierno y servidores públicos que trabajan para hacerla posible. Ellos diseñan y organizan el presupuesto, lo distribuyen al establecimiento de salud, contratan al personal, compran los medicamentos y aseguran que todo funcione. Eso es política pública.
–¿Qué mensaje les transmitiría para que defiendan la meritocracia y elijan autoridades idóneas?
Es fundamental que comprendan que quienes trabajan en el Estado deben ser personas competentes y con vocación de servicio. El verdadero significado del servicio público es servir a la población, gestionar eficientemente el presupuesto y ofrecer servicios de calidad.
–¿En qué debe comprometerse la ciudadanía?
La ciudadanía debe comprometerse a elegir bien a sus representantes, fiscalizar y acompañar la ejecución de las políticas públicas. La sociedad civil debe participar, ejercer su ciudadanía y exigir transparencia. No se trata de que un gobierno actúe de manera aislada, sino que sea participativo y responda a las necesidades de la población.
–¿Por qué es importante el servicio civil?
El servicio civil es fundamental para mejorar la calidad de vida de toda la población.
Tecnología y servicio
Para la presidenta de la ENAP de Brasil, el uso de la tecnología potencia los servicios que ofrece el Estado a la población. Según ella, en Brasil existe la plataforma gov.br, que permite a los brasileños acceder a una serie de servicios públicos digitalizados de manera segura.Uno de estos servicios es la certificación electrónica.
“Anteriormente, las personas debían pagar por la firma electrónica para que las empresas pudieran verificarla. Sin embargo, ahora esto no es necesario, ya que se pueden firmar documentos electrónicamente de manera gratuita. Esto ha permitido que la población ahorre tiempo, pues antes debían realizar este trámite de manera presencial”.
Lee también:
Además, la presidenta mencionó que la ENAP está capacitando a los servidores públicos del sector ejecutivo en el uso de las herramientas de Google y Microsoft para mejorar su productividad.
IA y transparencia
La presidenta de la Escuela Nacional de Administración Pública (ENAP) de Brasil, Betania Lemos, informó en el X Encuentro Iberoamericano de Escuelas, Institutos y Sistemas de Formación y Capacitación de Funcionarios Públicos, realizado en Lima, que el uso de la Inteligencia Artificial (IA) en el Estado es aún incipiente. Sin embargo, se están llevando a cabo experimentos para incorporarla al servicio público.
"Considero que la gran contribución de esta tecnología será facilitar el acceso de las personas al servicio público, de manera similar a como lo hacen las aplicaciones que utilizamos a diario para gestionar nuestras vidas", afirmó.
Asimismo, mencionó que uno de los experimentos en desarrollo consiste en utilizar la IA para identificar a las personas que no pagan impuestos. "Esto tiene que ver con la transparencia", destacó.
Además, están desarrollando una especialización para los funcionarios interesados en aplicar esta nueva tecnología: Datos e IA.
Más en Andina:
(FIN) DOP/ SMS
JRA
Publicado: 16/12/2024