Un total de 1,308 productores cacaoteros, promovidos por la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), iniciaron la cosecha selectiva de 1,054 toneladas de cacao en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), con el propósito de comercializarlo a mercados más competitivos.
Como parte de la
Política Nacional Contra las Drogas al 2030, Devida impulsa esta acción en los distritos de Samugari, Santa Rosa, Ayna, Sivia, Llochegua y Canayre, en Ayacucho; Pichari y Kimbiri, en Cusco; Mazamari, Pangoa y Río Tambo, en Junín.
En esos distritos los productores fueron dotados de herramientas e insumos para mejorar la cadena productiva del cacao en las variedades de CCC-51, VRAE-99, VRAE-15, Bella Vista y otras.
La cosecha selectiva juega un papel determinante en la obtención de granos de calidad, ya que facilita las labores de poscosecha, que permite estandarizar el producto para ofrecerlo a un mejor precio y acceder a nuevos y mejores mercados a escala nacional e internacional.
Para este fin, el equipo técnico de la actividad cacao de Devida en el Vraem fortalece las habilidades y capacidades agrícolas de los participantes en temas de abonamiento, control de maleza, poda de mantenimiento y otros para hacer de este cultivo una actividad rentable y sostenible.
Antes de la intervención de Devida, la producción de cacao en el valle era de 400 a 500 kilogramos por hectárea, pero a partir de la atención que se brinda a los agricultores el nivel de rendimiento se incrementó a 950 kilos, lo que evidencia la importancia de la asistencia técnica y la entrega de un paquete tecnológico.