El Virus del Papiloma Humano (VPH) es una de las infecciones de transmisión sexual más frecuentes en el mundo. Se estima que el 90% de las personas sexualmente activas lo contraerán en algún momento de su vida.
Aldo López Blanco, director ejecutivo del Departamento de Cirugía Ginecológica del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), señaló, sin embargo, que en la mayoría de casos el sistema inmunológico elimina el virus sin que cause problemas, pero que en aproximadamente el 10% de los casos la infección persiste, lo que aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino u otros tipos de cáncer asociados al VPH.
Advirtió que el VPH es una infección que pasa desapercibida y subrayó la importancia de hablar sobre la transmisión del VPH sin estigmatizar a las personas. "Se debe dar a conocer que el virus se transmite principalmente durante el contacto sexual”, destacó.
La infección puede afectar no solo el cuello uterino, sino que también puede afectar la mucosa o la piel de los genitales externos. Además, si una pareja tiene el virus y mantiene relaciones sexuales orales, es probable que el VPH esté presente en la cavidad oral.
Resaltó que la alta prevalencia del cáncer de cuello uterino en el Perú también se debe a una débil cultura de prevención y al miedo. "Recibir un diagnóstico de VPH no significa que la persona desarrollará cáncer. La clave está en la detección temprana y el seguimiento adecuado", enfatizó.

Tipos de VPH
El ginecólogo oncólogo explicó que existen más de 100 tipos de VPH que afectan a diferentes especies, incluyendo a los seres humanos, los cuales se dividen en dos grupos según su potencial de riesgo. Los de bajo riesgo no están relacionados con el desarrollo de cáncer, aunque pueden causar verrugas genitales en hombres y mujeres. Los más comunes en este grupo son el VPH 6 y el VPH 11.
En contraste, los tipos de alto riesgo tienen una mayor probabilidad de causar cáncer. Se han identificado entre 14 variantes asociadas a enfermedades neoplásicas como el de cuello uterino, pene, ano, vulva y cavidad orofaringe, aunque con distintos niveles de riesgo. Los más vinculados al cáncer de cuello uterino son el VPH 16 y el VPH 18.

La vacuna: la mejor estrategia de prevención
“La vacunación contra el VPH es la estrategia más efectiva para prevenir el cáncer de cuello uterino. Protege contra los tipos más agresivos del virus y ha demostrado reducir significativamente su incidencia en países con alta cobertura”, precisó el especialista del INEN.
El Ministerio de Salud del Perú ofrece la vacuna contra el VPH de manera gratuita a niñas y niños y adolescentes entre 11 y 18 años, con una efectividad por encima del 95% en quienes la reciben antes del inicio de su vida sexual. Sin embargo, también es recomendable para los que ya han iniciado su vida sexual, ya que proporciona protección frente a nuevas infecciones. “Vacunar a los varones no solo protege su salud, sino que también contribuye a reducir la transmisión del virus a sus parejas”, agregó el Dr. López Blanco.
La prevención del cáncer de cuello uterino no solo depende de la vacunación del VPH, sino también de los chequeos médicos periódicos, como el Papanicolaou y las pruebas moleculares. Es la única manera de detectar la enfermedad a tiempo. "Si se detecta en una etapa inicial, la tasa de curación es muy alta", concluyó López Blanco.
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(FIN) NDP/JRD
Publicado: 26/3/2025