El megapuerto se inaugurará el 14 de noviembre con cuatro terminales en operación y tendrá una marcha blanca de dos meses y luego empezará con la operación comercial al 100 %.
Con un sistema de manejo de carga diseñado para operar con precisión y eficiencia, cada contenedor será movilizado de forma coordinada, marcando un hito en la modernización de la infraestructura marítima.
Este megapuerto posicionará a Perú como un referente en el sector, optimizando el intercambio comercial entre Sudamérica y el resto del mundo.
“El terminal portuario de Chancay transformará a Perú en un centro regional clave para el comercio marítimo con Asia, un destino que abarca más del 40 % de nuestras transacciones internacionales”, explicó el gerente de Asuntos Institucionales de Cosco Shipping Ports, Mario de las Casas.
La ejecución de este proyecto ha requerido de una inversión de 1,400 millones de dólares en una etapa inicial, resaltando su importancia estratégica y su impacto en la economía nacional, subrayó.
“Esta infraestructura estratégica no solo posicionará al país como un actor principal en el comercio global, sino que también consolidará nuestra relevancia en la región”, afirmó.
Uno de los principales beneficios de esta obra monumental es la reducción significativa del tiempo de transporte de productos hacia Asia, disminuyendo el trayecto de 35 a 25 días.
Esto permitirá que los productos peruanos lleguen a sus mercados de destino con precios más competitivos, potenciando las exportaciones nacionales. A su vez, los consumidores peruanos se beneficiarán con el acceso a productos importados a precios más bajos, gracias a la optimización de los costos logísticos, mencionó el funcionario.
Puerta comercial
Además, el puerto de Chancay abrirá una nueva puerta comercial hacia el continente asiático, no solo para Perú, sino también para países vecinos como Chile, Ecuador y Brasil. El proyecto convertirá a Perú en la puerta natural de Brasil hacia Asia por el Pacífico, reforzando nuestra posición geopolítica y generando nuevas oportunidades de comercio interregional.
El impacto económico del desarrollo de esta infraestructura también es significativo. “Tanto la construcción del terminal como las actividades vinculadas con su proceso han generado 7,500 empleos directos e indirectos, contribuyendo al bienestar de las comunidades locales y al desarrollo económico del país”
Este crecimiento en empleos es un testimonio del papel fundamental que el puerto de Chancay desempeña en el impulso de la economía peruana, subrayó Mario de las Casas.
El puerto de Chancay está listo para hacer historia como el primero en Perú con la capacidad de recibir buques de 18,000 contenedores TEU (unidad equivalente a veinte pies) a plena carga, los más grandes del mundo.
Esta capacidad lo posiciona a la par de los puertos más importantes en el ámbito global y refuerza su papel estratégico en el comercio marítimo internacional.
En términos de sostenibilidad, el puerto se destaca por incorporar tecnologías avanzadas. Sus grúas y vehículos serán completamente eléctricos y no tripulados, operando a través de un sistema centralizado de gestión. Esta innovación garantiza una operación carbono neutra, alineándose con los estándares ambientales más exigentes y reduciendo significativamente el impacto ecológico.
Moderna infraestructura
Con una profundidad de 17.8 metros, la mayor de Latinoamérica, Chancay está diseñado para manejar las necesidades de los barcos más grandes. Además, su rompeolas primario, de 2,678 metros de longitud, y un rompeolas secundario, de 230 metros, protegen el puerto y aseguran operaciones seguras y eficientes.
El puerto cuenta con una amplia zona operativa portuaria de 141 hectáreas, lo que permite un manejo eficiente y ordenado de la carga. Adicionalmente, el complejo de ingreso se extiende por 32 hectáreas, lo que facilita la entrada y salida de mercancías, garantizando un flujo logístico optimizado. Esta vasta extensión de infraestructura subraya la ambición del puerto de Chancay como un centro de operaciones marítimas de clase mundial.