La atención y el cuidado de las mascotas ha dado un salto enorme en los últimos tiempos en el Perú y ello se refleja en la presencia de un mayor número de veterinarias, algunas de las cuales ofrecen incluso acupuntura y hasta flores de Bach para controlar estados nerviosos de los "pacientes".
La
Agencia Andina, como parte del programa
Martes Educativo, visitó la Facultad de Medicina Veterinaria de la
Universidad San Marcos para conocer la importancia que ha cobrado esta carrera, que incluye no solo la atención de las mascotas sino el cuidado, la reproducción y el estudio de otras especies de animales como peces, alpacas, monos o aves.
"La sensibilidad, el temple y la paciencia son quizá los requisitos fundamentales para estudiar esta carrera", coincidieron los expertos al indicar que si bien es importante el gusto por los animales, también es vital tener el temple para hacer cortes quirúrgicos y la paciencia porque a veces el propio "paciente" no colabora.
Un can con una hernia inguinal, otro con deficiencia renal, y un tercero que sufre continuos desmayos fueron algunos de los casos observados por
Andina en la Clínica Veterinaria de
San Marcos, una especie de hospital que funciona dentro de la facultad y cuyos pacientes -en su mayoría de cuatro patas- son traídos por sus dueños desde diferentes puntos de Lima.
La vicedecana de la facultad, Rosa Perales, explicó que en el país hay alrededor de 10 mil profesionales registrados en el Colegio Médico Veterinario, muchos de los cuales atienden en Lima a animales menores (mascotas). "Nos estamos olvidando de los camélidos sudamericanos o del ganado lanar, por ejemplo, que están en provincias", advirtió.
Perales lamentó que al médico veterinario se le haya relacionado siempre únicamente con las mascotas, algo que es falso porque este profesional también trata, investiga y estudia a poblaciones como la avícola, la bovina e incluso hasta con cuyes y conejos.
Al igual que las especialidades en personas, el médico veterinario que
estudia en San Marcos escoge una especialidad antes de terminar su carrera de seis años: Medicina y sanidad animal, salud pública veterinaria, inocuidad de alimentos, producción y economía pecuaria, así como cuidado de ecosistemas y de la biodiversidad
Juan Diego Ascencio, del área de cardiología de la clínica, explicó que actualmente la medicina veterinaria vive el "boom de las especialidades" y que incluso hay reiki, acupuntura y flores de Bach para caninos y felinos. "Ahora hay para los animales un mundo más amplio del que había hace años".
Algunos estudiantes consultados por esta agencia indicaron que la carrera "es fascinante" y que ofrece mucho más en la línea de los animales mayores e inocuidad de los alimentos.
Destacaron que los aspirantes a veterinarios deben tener mucha fortaleza porque si bien se salvan vidas, también hay momentos en que es necesario enfrentar la muerte de los animales.