17:00 | Contumazá, oct. 2.
El déficit de agua y saneamiento en las zonas rurales, y especialmente en Cajamarca, tiene que ser revertido con una política de vigilancia ciudadana que fiscalice el uso de los recursos y garantice que su consumo sea seguro, afirmó hoy la ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Liliana La Rosa.
“Hay que cambiarlo con vigilancia ciudadana. Cuántos millones del canon han pasado por
Cajamarca;
tenemos la escultura del sombrero y no tenemos agua. No es posible. Tenemos que exigirles a las autoridades que cumplan con su rol:
la primera cosa que tenemos que exigirle a un alcalde es agua y desagüe”, subrayó.
Desde Contumazá, señaló que el Gobierno trabaja con las autoridades regionales y municipales en priorizar las obras de saneamiento y agua potable, en las circunscripciones rurales. Solo el 2 % de la población rural tiene agua y saneamiento.
“Esta es la oportunidad. El pueblo tiene en sus manos un importante instrumento: el voto de la gente. Las personas tienen un poder: el poder del voto ciudadano. Votemos bien. Ahí está el ejercicio ciudadano”, comentó en vísperas de los
comicios del 7 octubre.
Unir esfuerzos
En diálogo con la
Red de Comunicación Regional (RCR), La Rosa manifestó también la necesidad de unir esfuerzos y coordinar acciones entre las distintas entidades estatales, privadas y sociales para desarrollar una estrategia eficaz de lucha contra la
anemia y la desnutrición infantil.
“El Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) es el gran coordinador del desarrollo y la inclusión. ¿Quiénes tienen que ver directamente?: El gobierno local, articulado con el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, porque para combatir la anemia lo que necesitamos es agua limpia y potable para el consumo humano”, anotó.
Refirió que en este empeño debe desarrollarse tres acciones fundamentales como son la urgencia de cambiar la cultura nutricional de las personas, la aplicación de una política de alimentación saludable a los menores y, en tercer lugar, la educación de los niños en las buenas prácticas alimenticias.
Corrupción
En otro momento, la titular del Midis pidió el apoyo de la población y de las instituciones en el combate a la corrupción, que origina pérdidas anuales por más de 12,000 millones de soles, ya que --anotó-- el costo de esta lacra se da en vidas humanas, especialmente de las madres y niños que vive en situación de pobreza.
“Desgraciadamente, existen corruptos y mafias que, a veces, son encubiertas por jueces no probos y una justicia que no llega oportunamente a los más pobres. La corrupción cuesta vidas, no solo es tráfico de dinero. Es una forma de quitarle la vida a la gente. Impide que el Estado avance y lleguemos con lo que corresponde”, enfatizó.
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(FIN) NDP/JOT
Publicado: 2/10/2018