14:48 | Ayacucho, ene. 29.
Por Azucena Romaní Tafur, enviada especialCarlos Añaños trabajó por tres décadas en la empresa Aje, fabricante de refrescos de propiedad de su familia. Fue el encargado de lograr la expansión de la marca en los países menos imaginados como Madagascar y el Reino de Bután, un país asiático donde descubrió que el desarrollo no se mide por el producto bruto interno sino por los índices de la felicidad del pueblo.
Una realidad tan ajena lo hizo reflexionar que si bien había hecho una carrera profesional exitosa le faltaba algo en la vida y era trabajar de manera más directa por la tierra que lo vio nacer, para que el mundo conozca de la gran riqueza cultural e histórica de
Ayacucho.
Asimismo, la enorme capacidad de resiliencia de su gente que vivió una de las épocas más negras de la historia de nuestro país con la violencia terrorista, pero que ha sabido resurgir y seguir adelante.
Dio forma, entonces, a la idea de hacer de Ayacucho un ejemplo para las demás regiones, pero también para el mundo. Hay tanta riqueza en esta tierra pero es poco conocida, por lo que entendió que ese era el punto neurálgico de todo.
Ayacucho debe tener su propia marca y para ello hace poco más de año y medio se formó Pikimachay, el patronato que lleva el nombre de las cuevas que albergaron a antiguos peruanos preincaicos.
"Queremos que la Marca Ayacucho sea el hilo conductor para poner en relevancia los atributos diferenciados de esta tierra, su música, sus danzas, la historia, porque no podemos olvidar que estas tierras fueron la cuna del poderoso imperio Huari y escenario de la batalla de la independencia", afirmó a la Agencia Andina.
Cuatro pilares
Los cuatro pilares de trabajo que Pikimachay se ha propuesto para impulsar el desarrollo de Ayacucho es que en alguna categoría sea reconocido por la Unesco como patrimonio del mundo.
"En ese esfuerzo estamos comprometidos tanto el patronato como el Ministerio de Cultura, cuyos equipos ya están trabajando con la Unesco, la Alcaldía y la Gobernación para pelear la nominación de
Ciudades Creativas. Es un proceso, largo pero esperamos tenerla para el Bicentenario", comentó.
Otro de los lineamientos del trabajo del patronato es lograr una "ciudad inteligente", tarea en la que se ya avanzado considerablemente y ya se tiene un inventario de unos 45 kilómetros del Centro Histórico de Huamanga.
Ya hay alrededor de 500,000 piezas registradas, es decir, las ventanas de cada casa, de qué material son, así como las puertas y las fachadas si son de madera, yeso, piedra, ladrillo, etcétera; las farolas de qué tipo arquitectónico son y demás datos necesarios.
Todo este material digitalizado servirá para un proceso de revalorización del casco histórico como data para cuando se vaya a restaurar y poner en valor las casonas de la capital ayacuchana, agregó Añaños.
Un tercer pilar de este trabajo es el enfocado en la seguridad ciudadana y por eso desde el año pasado se lanzó el APP Tucuy Ricuy, que ayuda a que solo con tres clics se pueda pedir ayuda a la Policía o el serenazgo.
"El 67 % del peso de una decisión sobre adónde ir de vacaciones es la seguridad y por eso tenemos que darla si queremos que los turistas vengan a Ayacucho", remarcó.
Anotó que el cuarto lineamiento de trabajo es precisamente la
Marca Ayacucho que será el hilo conductor de los otros tres pilares.
Considerando que este es un trabajo de largo aliento, Añaños confesó a la Agencia Andina que en diez años ve a su tierra como una región en equilibrio y paz, donde haya trabajo digno y posibilidades de hacer empresa, donde la riqueza ayacuchana se conozca en el mundo y no haya más niños con anemia.
"Queremos que las zonas rurales de Ayacucho tengan mejor calidad de vida y la educación sea un derecho de todos y la salud no sea un lujo para nadie". Ardua tarea que le espera por el progreso de su tierra.
La Marca Ayacucho fue presentada hoy en una ceremonia especial a la que asistió el presidente Martín Vizcarra, en el auditorio de la Municipalidad Provincial de Huamanga.
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(FIN) ART/JOT
Publicado: 29/1/2019