“El café contiene un gran número de sustancias bioquímicamente activas. Una de las más importantes y conocidas es la cafeína, pero además es una fuente considerable antioxidantes llamados polifenoles y compuestos fenólicos. Los más relevantes son los ácidos clorogénico, fenílico y cafeico. Estos últimos, evitan el daño que producen los radicales libres al reducir su formación o eliminarlos cuando se activan”, explicó la nutricionista Claudia Agüero.
De acuerdo a la especialista del portal Salud en Casa, el consumo de café en ciertos casos reduce el riesgo de padecer diabetes tipo 2, aunque falta precisar los mecanismos responsables de este efecto, por lo que deben continuar las investigaciones.
“También se ha observado que el consumo de cantidades moderadas de café reduce el riesgo de infarto del miocardio. El consumo de hasta 300 mililitros diarios de café representa un factor de protección de infartos e hipertensión arterial. Sin embargo, el consumo superior a 600 mililitros diarios aumenta los riesgos mencionados”, manifestó Agüero.
La nutricionista consideró que el beneficio protector del consumo de café en forma moderada se debe al efecto protector frente a los antioxidantes. “De todas formas, hace falta estudios que puedan establecer una recomendación más concreta”, comentó.
Diversas asociaciones de productores de café del Valle del Río Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), principalmente de la región Ayacucho, cuentan con registro del Indecopi, gracias al apoyo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida).
(FIN) NDP/LZD/MAO