Chancahuaña hoy se suma a las 128,622 personas que fueron dados de alta de esta enfermedad y dice que espera volver al trabajo para continuar salvando vidas.
“Ahora veo la vida de otra manera, me siento más fortalecido y con las mismas ganas de brindar mi granito de arena en la lucha contra esta enfermedad”, declaró este licenciado en Enfermería del Servicio de Emergencia Adultos de este nosocomio.
También dijo que jamás pensó que se iba a contagiar ni, mucho menos, ver comprometida su vida a pesar de no estar dentro del grupo de riesgo y con una excelente condición física.
“No pensé que el virus me iba a tumbar de esta manera. En mi trabajo siempre tomé todos los cuidados de bioseguridad posibles, sin embargo, bastó un descuido para estar a punto de no volver a ver a mi familia”, manifestó.
Su estado de salud se complicó el 19 de mayo, fecha que ingresó a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde permaneció durante 15 días conectado a un ventilador mecánico. El equipo de salud luchó junto con él, día a día, hasta conseguir que superase la condición crítica.
Una vez superada esta fase, ingresó al Servicio de Cuidados Especiales (UCE) del Servicio de Emergencia Adultos, donde todo el equipo de salud, conformado por médicos, licenciados y técnicos de enfermería, continuó la atención, sin escatimar esfuerzos y brindando el apoyo emocional para el compañero en recuperación.
Luego de 23 días, fue dado de alta. Su gran fortaleza emocional fueron su esposa Viviana y sus hijas Yaisa y Viviana, quienes enviaron mensajes de audio y videos de aliento para que su querido Guillermo supere la batalla y retorne al hogar.
El enfermero ahora se encuentra recuperándose en casa al lado de su familia.
Recuerda, con entusiasmo, que uno de sus compañeros de trabajo, representante de la denominada 'marea turquesa' de licenciados en enfermería del hospital le dejó este potente mensaje: "Eres enfermero, un solo puño, una oración, eres Cayetano puro corazón”.
Más en Andina:
JRA