Desde que se declaró la emergencia sanitaria por la pandemia del covid-19, el Instituto Nacional Cardiovascular (Incor) de EsSalud atendió a 828 menores de edad con enfermedades al corazón que fueron referidos de las diversas regiones del país para ser atendidos en el único centro especializado del país, que trata todo tipo de cardiopatías congénitas y patologías complejas.
Uno de los casos es el de Dylan, un bebé de 11 meses procedente de la ciudad de Tarapoto, región San Martín. A los 7 meses fue diagnosticado con una patología denominada “ductus arterioso persistente”, cardiopatía donde un vaso sanguíneo adicional está presente, el cual puede causar un flujo excesivo de sangre hacia los pulmones y forzar el músculo cardíaco.
Esta enfermedad suele presentarse en bebés prematuros y debido al cierre tardío de conductos cardiovasculares, puede generar problemas como el crecimiento inusual del corazón, el mal desarrollo físico o enfermedades respiratorias.
Para corregir esta anomalía, los
especialistas en cardiopediatría del Incor, le realizaron a Dylan un procedimiento intervencionista a través de catéteres para el cierre per cutáneo del ductus.
Posteriormente, verificaron el éxito del tratamiento con exámenes de radiografía y ecocardiografía. La operación fue rápida y la recuperación también, sin necesidad de una cirugía a pecho abierto.
“Es la ventaja que tenemos. Ingresa un día y se le hace el procedimiento al día siguiente. Visualizamos que todo esté bien y el paciente ya está de alta”, explica la cardióloga pediátrica Marcela Miranda sobre el proceso de atención en el Incor con este tipo de pacientes.
La mamá del pequeño Dylan, Guisela Chuña, se enteró de manera sorpresiva que su hijo tenía una cardiopatía cuando lo llevó al Hospital de Tarapoto por otra dolencia. El diagnóstico a tiempo permitió la atención oportuna del menor.
“Nosotros como papás nos asustamos mucho, estábamos tristes. Ahora estamos más tranquilos. Hemos recibido buena atención de los doctores y enfermeras”, señaló la madre.
La doctora Miranda resalta que este tipo de tratamiento resuelve por completo el problema cardíaco. “Nosotros hacemos el procedimiento para que nuestros niños tengan una vida normal. Solo el control inmediato para ver que el corazoncito esté bien y de ahí en adelante ya no necesitaría más atención por parte de nosotros.”
Centro especializado
El Instituto Nacional Cardiovascular es actualmente el único centro especializado en el Perú que realiza trasplantes pediátricos y ha logrado esta proeza médica en 11 ocasiones, siendo el último en enero de este año.
El Incor realizó 249 procedimientos mínimamente invasivos a pacientes pediátricos durante el 2021. Se estima que uno de cada ocho nacidos tiene una cardiopatía congénita en el país.
(FIN) NDP/JCB/MAO
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Publicado: 11/5/2022