La economía peruana crecería 3% este año y 4.4%, en promedio, en los próximos cuatro años, con una senda gradual de aceleración de 4% en el 2020 y 5% en el 2023, señaló el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
El MEF publicó hoy el Marco Macroeconómico Multianual 2020-2023 (MMM).
"A pesar del débil dinamismo de los sectores primarios, el componente no primario del PBI se mantuvo resiliente y alcanzó una tasa de crecimiento de 3.3% en el primer semestre de 2019. Asimismo, la inversión privada se aceleró de 2.9% en el primer trimestre a 5.1% en el segundo trimestre", indicó.
"Para los próximos meses se prevé que la economía continúe acelerando su crecimiento, impulsada por la mayor inversión privada, asociada a la mayor ejecución de proyectos de infraestructura como la Línea 2 del Metro de Lima y Callao y la continuidad de los grandes proyectos mineros como Quellaveco, Mina Justa y ampliación de Toromocho", agregó.
Asimismo, el MEF sostuvo que la inversión pública se recuperará por una mayor ejecución de las obras de reconstrucción y de la modernización de la Refinería de Talara, en un entorno de medidas adoptadas para mejorar la ejecución de los gobiernos subnacionales. Estas mayores inversiones permitirán la mejora del empleo formal y de los ingresos de las familias.
"Los sólidos fundamentos macroeconómicos de Perú serán importantes para enfrentar la incertidumbre del contexto internacional. De esta manera, se ratifica el trabajo que viene desarrollando el Gobierno por sentar las bases de un crecimiento económico sostenible y con bienestar social, para lo cual se viene trabajando desde distintos sectores de la economía", afirmó.
Carlos Oliva señaló que para alcanzar estándares de países desarrollados en los próximos 20 años, es fundamental seguir trabajando para que la economía peruana crezca a tasas mayores a 5%. En ese sentido, en el marco de la estrategia integral para mejorar la competitividad y la productividad del país e impulsar el crecimiento económico de mediano y largo plazo, el Gobierno presentó el Plan Nacional de Competitividad y Productividad en julio de 2019.
Explicó que este plan presenta una síntesis articulada y consensuada de un conjunto priorizado de medidas de política con el fin de avanzar en la consecución de la visión de país establecida en los nueve objetivos prioritarios de la Política Nacional de Competitividad y Productividad, cuya implementación permitirá sentar las bases para un crecimiento económico más alto y sostenido en el mediano y largo plazo.
Como parte de uno de los objetivos prioritarios se aprobó también el Plan Nacional de Infraestructura para la Competitividad, que representa el primer esfuerzo del Estado Peruano por alinear la visión de un país más competitivo, a través de la priorización de proyectos de infraestructura necesarios para el desarrollo económico, con una perspectiva sectorial y territorial.
En cuanto a las finanzas públicas, las proyecciones fiscales se han elaborado de conformidad con el marco macrofiscal vigente y son consistentes con el fortalecimiento de las cuentas fiscales y la sostenibilidad fiscal, pilares para la estabilidad macroeconómica. En consistencia con ello, el déficit fiscal convergerá a 2% del PBI en 2020 y se ubicará en 1% del PBI a partir de 2021 en adelante, en concordancia con el marco legal vigente.
Esta trayectoria es consistente con la normalización del crecimiento económico de la economía peruana y el efecto esperado de las medidas tributarias emprendidas desde 2018, las cuales se basan, principalmente, en el combate a la evasión y elusión de impuestos a través de mejoras al marco de fiscalidad internacional y a la masificación de comprobantes de pago electrónico.
Cabe mencionar que, en el último año, los niveles de incumplimiento tributario del Impuesto a la Renta (IR) e Impuesto General a las Ventas (IGV) se redujeron en 1 y 3.8 puntos porcentuales (p.p.), respectivamente, luego de 3 años de incrementos sucesivos. Se prevé que, a 2023, el incumplimiento de dichos impuestos se reduzca alrededor de 3 p.p.
El MMM 2020-2023 ha considerado una sección especial dedicada al análisis de riesgos que pueden tener las proyecciones, tanto por factores internos como externos, así como los posibles riesgos que enfrenta la política fiscal.
Esta práctica permite fortalecer la transparencia y la solidez fiscal del país, factores que han sido claves para que Perú mantenga su calificación crediticia con perspectiva estable y sea la economía de menor riesgo país de la región.
Asimismo, debe mencionarse que a pesar del difícil entorno internacional generado por la intensificación de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, que han afectado severamente el panorama económico global, la economía peruana mantiene el nivel de riesgo país más bajo de la región.
En lo que va del año (hasta el 22 de agosto), el riesgo país de Perú ha alcanzado en promedio 108 puntos básicos (pbs), por debajo de lo registrado por otras economías de la región como Brasil (245 pbs), México (209 pbs), Colombia (188 pbs) y Chile (135 pbs).
De esta manera, se ratifica el trabajo que viene desarrollando el Gobierno por sentar las bases de un crecimiento económico sostenible y con bienestar social, para lo cual se viene trabajando desde distintos sectores de la economía.