César Vallejo Mendoza fue declarado poeta del Bicentenario de La Libertad por el consejo regional, un reconocimiento que pretende poner de relevancia la figura de este personaje en la cultura liberteña, nacional y mundial.
Fue a través del Acuerdo Regional N.° 082-2021-GRLL/CR tras la propuesta presentada por el consejero de la provincia de Santiago de Chuco, Santos Vásquez Ibáñez, quien sustentó que la celebración de los 200 años de independencia es la mejor oportunidad de reconocer la valía del escritor al ser un peruano ilustre del siglo pasado.
“Es un homenaje oportuno a nuestro poeta de Santiago de Chuco, cuya obra ha trascendido hasta llegar a ser reconocido a nivel mundial. Sus poemas revolucionaron la literatura, calando mucho en temas profundos del ser humano. Estamos muy felices porque se planteó la iniciativa al consejo regional y ha sido aprobada por unanimidad”, dijo el consejero.
En el documento se menciona que el vate es considerado uno de los más grandes innovadores de la poesía universal del siglo XX. “Es una de las voces literarias más originales de la lengua española, pero a la vez incomprendido por muchos de su época porque construyó una nueva forma de presentar los versos”, reza el acuerdo.
Vida y obras
César Vallejo nació en 1892 en la provincia de Santiago de Chuco, región La Libertad. Si bien sus primeros años los vivió allí, su adolescencia la atravesó en Trujillo; se matriculó en la Universidad Nacional de Trujillo en la carrera de Filosofía y Letras, y después en la Universidad de San Marcos, en Derecho, las cuales abandonó al poco tiempo.
Sin embargo, esto le sirvió para desarrollar amistad con los mejores intelectuales de la época y formar parte del Grupo Norte, que reunió a los mejores intelectuales de la época en Trujillo, como Alcides Espelucín, José Eulogio Garrido, Víctor Raúl Haya de la Torre, entre otros.
Después iría a Lima, allí se desempeñó como profesor de primaria y se relacionó con destacados personajes como Manuel González Prada, Abraham Valdelomar y José Carlos Mariátegui. Al retornar a Santiago de Chuco fue encarcelado y tras salir a prisión volvería a Lima para viajar a España, enrolarse en el partido Comunista e instalarse en París, donde falleció en 1938.
Sus poemas y textos reflejan su variada experiencia vital, desde los paisajes bucólicos de su niñez hasta su preocupación política, la ternura del amor y la pasión, las creencias católicas con las que creció y la racionalidad agnóstica que lo acechaba, la melancolía y la alegría genuina.
Algunos de sus poemarios son: Los heraldos negros, Trilce, España, aparta de mí este cáliz y Poemas humanos”. En prosa escribió el cuento Paco Yunque y las novelas cortas El tungsteno, Fabla salvaje, entre otras.