La comisaría de familia de la ciudad del Cusco puso en marcha un piloto, único en el país, orientado a prevenir los casos de feminicidio y las reincidencias de violencia familiar, como parte del cual se visitará dos veces a la semana a las féminas que cuentan con protección ordenada por el Poder Judicial (PJ) para constatar que esta sea efectiva.
Con ese objetivo, inauguró el Departamento de Medidas de Protección Familiar, que funciona en la intersección de los jirones Paruro y Sicuani, en la urbanización Progreso del distrito de Wanchaq, y cuenta con 30 policías al mando de la comisaria de familia, mayor Edith Espejo.
Explicó que harán seguimiento a cada caso denunciado en salvaguarda de la integridad física y mental de las mujeres; además, elaborarán una estadística sobre las medidas de protección por brindar.
“Por mucha ley que exista, los índices [de violencia hacia la mujer] son muy altos, lamentablemente [...]. El año pasado, Cusco se ubicó en el tercer departamento con mayor número de casos”, indicó a la Agencia Andina.
Espejo informó que el año pasado se registraron 13 casos de feminicidio en el Cusco y en lo que va del año se han reportado 200 casos de violencia familiar y uno de riesgo.
Los policías del departamento trabajarán con los promotores del Centros Emergencia de la Mujer, con los que se hará un seguimiento específico a posibles víctimas y aquellas que cuentan con protección ordenada por el Poder Judicial.
Este nuevo departamento policial es parte de un proyecto piloto que centralizará las medidas de protección en la ciudad del Cusco y se espera que sea tomado como modelo en otras ciudades, subrayó.
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(FIN) PHS/JOT
Publicado: 6/3/2019