En un nuevo hito para el ajedrez peruano, la ajedrecista María Jiménez Salas se consagró bicampeona panamericana sub-20 en la categoría femenina. El certamen se llevó a cabo del 13 al 20 de junio en Asunción, Paraguay, y marcó un nuevo capítulo en su destacada trayectoria deportiva.
El torneo internacional, organizado por la Confederación de Ajedrez de América (CCA) y la Federación Paraguaya de Ajedrez (FEPARAJ), reunió a las mejores exponentes juveniles del continente de países como Canadá, Uruguay, Brasil, entre otros, en un entorno de alta exigencia técnica y competitiva.

Un camino de disciplina y logros
Con este nuevo triunfo, Jiménez Salas consolidó su dominio en la categoría sub-20 a nivel regional, al sumar un nuevo título panamericano al que ya había obtenido en 2024.
Además, alcanzó su segunda norma para el título de Gran Maestra Femenina (WGM), acercándose al más alto reconocimiento en el ajedrez profesional.
Durante su etapa escolar en el colegio Saco Oliveros, Jiménez Salas cosechó sus primeros grandes triunfos internacionales. En 2023, obtuvo el oro en Blitz y la plata en Clásico en el Panamericano Juvenil de EE. UU., además de la medalla de bronce en el Mundial Sub-17 realizado en el Callao, Perú.
También obtuvo triunfos en otras competencias continentales, como los panamericanos realizados en Bolivia (2022) y Perú (2023), así como en el sudamericano de la Juventud en Ecuador (2022).
“Este logro es muy importante para mí. Es fruto de años de esfuerzo constante y pasión por el ajedrez. Ganar este torneo representa una meta alcanzada, pero también una nueva motivación para seguir creciendo y dar lo mejor de mí en cada competencia”, afirmó la campeona tras su victoria.
Inspiración desde los primeros años
La ajedrecista peruana agradeció el respaldo incondicional de su familia y de su mentor, el maestro Juan Aguilar, con quien inició su formación desde temprana edad.
“Quiero agradecer de corazón a mi colegio Saco Oliveros, donde desde muy pequeña me inculcaron la disciplina y el amor por el ajedrez”, expresó.
Su madre Jacqueline Salas también compartió unas emotivas palabras: “María abrazó este camino con entrega total, inspirada desde muy pequeña por su abuelito, quien le inculcó el amor por el ajedrez y le contaba historias que despertaban su imaginación. (...) Nos emociona profundamente verla crecer como deportista y como una persona íntegra”.
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