El consumo frecuente de papa, nuestro tubérculo de bandera y considerado un superalimento, es esencial para fortalecer nuestro sistema inmune frente a diversas enfermedades, entre ellas el covid-19, por sus extraordinarias bondades nutricionales. Los nutricionistas recomiendan comerla con cáscara para aprovechar al máximo sus beneficios para la salud.
En víspera de celebrarse el Día Nacional de la Papa, la licenciada Ana Meléndez, del servicio nutricional del Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen de EsSalud, sostuvo que la papa se usa sin inconvenientes en la dieta blanda de un paciente covid-19 cuando está incapacitado de masticar o deglutir. “Licuada, la papa aporta esas calorías y energía que el paciente postrado necesita”, enfatizó.
Propiedades nutricionales
La nutricionista explicó que la papa nativa, aquella que vemos con la cáscara de colores intensos contiene hierro vegetal y zinc que, al complementarse con alimentos proteínicos de origen animal, crean una combinación muy saludable que cumple el importante rol de preparar nuestro organismo para enfrentar el nuevo coronavirus.
“El hierro es un componente en la formación de la hemoglobina, una proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno desde los pulmones hacia todo nuestro cuerpo. En tanto, el zinc ayuda al sistema inmunitario a enfrentar bacterias y virus”, subrayó.
Recordó que cuanto más oscura es la cáscara de la papa contiene un gran aporte de carotenos, antioxidantes importantes en la reparación celular.
“La papa tiene un componente de vitamina C, fundamental en la regeneración y crecimiento de tejidos en todo nuestro cuerpo, contribuye a la formación de una proteína importante utilizada para producir piel, tendones, ligamentos, vasos sanguíneos, formar el tejido cicatricial y refuerza el sistema inmune. Es importante destacar además su gran poder antiinflamatorio”, subrayó.
Consumo moderado
Meléndez precisó que, a pesar de sus múltiples aportes nutritivos, el consumo de papa debe ser moderado y formar parte de una dieta balanceada. Asimismo, es mejor consumir la papa sancochada y no frita, dado que se carga con aceite, manteca u otra materia grasa.
“Por ejemplo, en un plato de 22 centímetros de diámetro, la cuarta parte debe estar compuesta por un carbohidrato como la papa, otro cuarto con una proteína, y medio plato destinado a los vegetales”.
Alimento versátil
La versatilidad de este superalimento y su bajo costo que lo hace accesible a nuestras mesas permite que sea incluido en diferentes preparaciones de nuestros platos típicos.
Por ejemplo, la papa a la huancaína, la pachamanca o un guiso, causa, papa rellena, carapulca de papa seca, mazamorra de chuño o tocosh, una sencilla sopa, y hasta refresco de cáscara de papa con piña.
(FIN) NDP/LZD
GRM
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Published: 5/30/2021