Andina

¡Buena noticia! 1,365 familias de Cusco se protegen de heladas con casas calientes

Proyecto Mi Abrigo del Foncodes utiliza la tecnología del muro "trombe" para concentrar el calor

Más de un millar de familias de las zonas altas de Cusco se protegen de las heladas con las "casitas calientes" que ejecuta el Foncodes.

Más de un millar de familias de las zonas altas de Cusco se protegen de las heladas con las "casitas calientes" que ejecuta el Foncodes.

07:34 | Cusco, jul. 9.

Este invierno es diferente para 1,365 familias de las comunidades andinas del departamento de Cusco, quienes viven en zonas ubicadas a más de 3,500 metros sobre el nivel del mar y soportan temperaturas mínimas extremas, Ellos ahora cuentan con viviendas térmicas acondicionadas que les permiten enfrentar las heladas.

Así lo destacó el Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes) que ejecuta el proyecto Mi Abrigo e implementó estas viviendas térmicas en localidades ubicadas en nueve provincias de la región Cusco.

Ahora, las familias de las provincias de Espinar, Quispicanchi, Acomayo, Canas, Calca, Canchis, Urubamba, Cusco y Paruro, especialmente niños, niñas y adultos mayores, tienen mejores condiciones de habitabilidad y mayor protección contra las heladas. En las llamadas "casitas calientes", el Foncodes ha invertido un total de 18.4 millones de soles.


En la región Cusco, el proyecto Mi Abrigo ha intervenido en dos etapas. La primera se desarrolló en el 2017 en tres distritos de las provincias de Espinar y Quispicanchi, logrando atemperar 353 viviendas. La segunda etapa se cumplió en el 2019, con el acondicionamiento de 1,012 viviendas en 18 distritos de las provincias de Acomayo, Canas, Calca, Canchis, Urubamba, Cusco y Paruro.

“Durante este invierno, las familias habitan sus viviendas originales, pero en mejores condiciones que antes, luego de que las casas fueran  mejoradas completamente gracias al proyecto Mi Abrigo”, señala el jefe de la Unidad Territorial Foncodes Cusco, Pedro Ernesto Romero Urviola.

Se conserva el calor


Las "casitas calientes" han sido acondicionadas con la tecnología de muro "trombe", basada en el uso de láminas de policarbonato y tubos PVC. También cuentan con doble puerta y ventanas de madera, piso de madera machihembrada y cielo raso. Todo ello permite conservar el calor del día dentro de la vivienda para elevar la temperatura interior durante las noches y las madrugadas, cuando los termómetros registran marcas bajo los cero grados centígrados. Además, las paredes están revestidas con yeso blanco y pintadas por dentro y por fuera, y reforzadas con geomalla biaxial para proteger la estructura ante posibles sismos.

El Estado, a través del Foncodes, invierte en cada "casita caliente" 16,000 soles en promedio. Este monto es variable, ya que en las comunidades rurales las viviendas se hallan dispersas, lo que implica mayor distancia para el traslado de cemento, calamina, madera, láminas y otros materiales, lo cual aumenta la inversión.


En las visitas de supervisión de las obras del proyecto Mi Abrigo se ha podido evidenciar la gran satisfacción de los usuarios. Ellos manifiestan que no solo están contentos por el confort térmico que les brinda el muro "trombe", también por lo acogedoras y llamativas que se ven sus viviendas. Sobre todo sienten tranquilidad, porque ahora los niños, las niñas y los adultos mayores tienen protección ante las heladas, lo cual evita que sufran afecciones respiratorias.

Con las "casitas calientes" las familias usuarias han mejorado su calidad de vida. Antes, sus pisos eran de tierra; las paredes, de adobe; y el techo, de calamina. Sus viviendas originales, en su mayoría, eran producto de la autoconstrucción y no brindaban seguridad técnica ni comodidad.

Esto dicen los usuarios


Durante sus visitas a las comunidades se recoge el sentir de las familias usuarias. “En la comunidad de Hanchi Pacha, distrito de Pitumarca, provincia de Canchis, un usuario nos decía: ingeniero, ahora tendré que comprar una cama, cómo voy a seguir durmiendo en el suelo en una casa tan bonita”, indica el jefe de la Unidad Territorial Foncodes Cusco.

El funcionario refiere que, igualmente, en la comunidad de Tocsa Cota, en el distrito de Maranganí, también en Canchis, la gente le decía que era la primera vez que el Gobierno intervenía en esa zona de pobreza extrema que limita con la región Puno, y que ello había mejorado su calidad de vida.

“Lo manifestado por los pobladores nos permite reflexionar sobre nuestro rol. Es realmente satisfactorio saber que hemos podido aportar para generar valor público en bien de los pobladores de zonas extremadamente pobres”, refiere el representante del Foncodes.

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(FIN) NDP/MAO
GRM

Published: 7/9/2020