Por Miguel De la Vega PolancoEn junio de este año se registró una expansión del sector agropecuario del 7% comparado con similar mes del 2016. El ministro de Agricultura y Riego, José Manuel Hernández destacó que su sector ya ingresó a un terreno de recuperación con altas expectativas para el segundo semestre.
En diálogo con el Diario Oficial El Peruano explica los avances, oportunidades y expectativas del sector agropecuario en el país.
¿Cuáles son las perspectivas del sector para este segundo semestre?
Se recuperará significativamente y revertirá lo perdido en el primer semestre. En junio pasado se registró una expansión de 7% [comparado con similar mes del 2016] , por lo que el sector agropecuario pasó a terreno positivo. Recordemos que debido al Fenómeno El Niño Costero, en los primeros meses del año se registró una tasa de crecimiento negativa.
Los resultados de junio nos dan una gran expectativa. El Niño Costero nos afectó, pero a su vez nos permite mayores siembras en esta segunda campaña. Ello nos da la posibilidad de seguir apostando a un crecimiento de aproximadamente 3% al final del año.
En cuanto a las agroexportaciones, ¿cuáles son las expectativas?
Las agroexportaciones continúan creciendo, pese a los problemas de incendios que significaron la pérdida de 25,000 hectáreas en todo el país, así como de las sequías e inundaciones.
En el primer semestre hemos crecido alrededor de 10%. Ello nos permite ver con mucho optimismo la meta que nos hemos fijado hacia el 2021, de alcanzar los 10,000 millones de dólares en exportaciones.
¿Qué otras medidas favorecerán la recuperación del sector?
Inyectaremos recursos para la reconstrucción, apoyando decididamente a los agricultores. Si a ello le sumamos el lanzamiento del seguro agrario catastrófico con una mayor cobertura, con seguridad alcanzaremos un crecimiento adecuado para el sector este año. Nuestras expectativas son bastante optimistas en este momento.
¿Cuáles son los aspectos más resaltantes del Seguro Agrario Catastrófico?
Uno de los objetivos que nos propusimos fue mejorar las condiciones del crédito. En el caso del Seguro Agrario Catastrófico, convocamos una licitación y se asignó a cuatro empresas la cobertura del seguro. Ello nos permitió, en primer lugar, reducir el costo del seguro en sí de cerca del 13% a 9%. Esto es positivo debido a que propiciamos una mayor competencia.
En segundo lugar, ampliamos la cobertura añadiendo dos riesgos más. Uno está conformado por los terremotos y erupciones volcánicas.
Asimismo, ampliamos la cobertura de ocho a 14 regiones, seis más que fueron las afectadas por El Niño Costero.
También aumentamos la cobertura en cultivos. Antes teníamos papa, maíz, cebada, frijol, trigo, cebada y arveja, cultivos propios de la Sierra, Hoy incluimos tres nuevos productos: algodón, maíz amarillo duro y frijol caupi.
Pero lo más importante es que, en relación con el agricultor, la retribución o cobertura pasó de 550 soles por hectárea a 650 soles. Esto nos está permitiendo ampliar en alrededor de 20% la superficie cubierta. Ya pasamos de 550,000 a 660,000 hectáreas.
De esta manera, estamos cumpliendo con lo que establecimos al inicio de nuestra gestión, que ampliaremos la cobertura del seguro y ya lo hemos logrado.
¿Cuál es el costo de esta mejora en la cobertura?
Lo más destacado de todo esto, es que obtenemos estos logros con la misma cantidad de dinero que tenemos como prima en los dos últimos años, que es de 39 millones de soles. Al haber reducido los costos, otorgamos una mayor cobertura y brindamos más recursos [dinero] a los agricultores, pero con un menor costo en el seguro. Ese es un gran avance.
¿Cómo evalúa los avances del programa Sierra Azul?
Se trata de un programa emblemático del Gobierno. Tenemos como meta que el 100% de las poblaciones urbanas deben tener disponibilidad de agua.
Sierra Azul es un elemento clave para asegurar el suministro de agua, construimos e implementamos almacenes, reservorios, lagunas en las zonas altoandinas donde hay mucha pobreza y poca agricultura, utilizando todas las técnicas ancestrales de los antiguos peruanos.
Así, ya aseguramos el suministro de agua para 63,000 hectáreas en lo que va de este gobierno, porque promovemos la tecnificación y el riego presurizado, que nos permiten cambiar de pastos naturales a pastos cultivados con facilidad.
Por debajo de los 3,000 metros de altura podemos sembrar hortalizas y productos que en la parte altoandina registran un déficit.
El impacto de Sierra Azul es inmediato, porque son obras pequeñas que se desarrollan en menos de un año y permiten mejorar la producción.
¿Qué tan atractivo es el Perú para la inversión agropecuaria?
Realmente es muy atractivo. Hay mucho espacio para el desarrollo de proyectos y tenemos propuestas de asociaciones público-privadas (APP) para Piura, Lambayeque e Ica. Además, en esta última región es posibe ampliar la frontera agrícola orientada a la agroexportación. Así, fácilmente podríamos duplicar las áreas dedicadas a la exportación, tenemos un gran potencial.
Precisamente, a raíz del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), recibimos la visita de un gran número de inversionistas y empresas internacionales de alimentos interesados en invertir en la Costa.
El desarrollo forestal es una gran oportunidad, contamos con 73 millones de hectáreas de bosques. Todos los años perdemos cerca de 150,000 hectáreas, y como Gobierno llevamos adelante un programa de reforestación.
También disponemos de un proyecto de ley que pronto presentaremos al Congreso para promover el desarrollo forestal. Si sembramos tres millones de plantones, rápidamente podemos crecer tranquilamente dos puntos del producto bruto interno (PBI). Hemos identificado alrededor de 4.5 millones de hectáreas que podemos trabajar.
Metas del sector
El titular del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) sostuvo que su sector tiene cuatro grandes metas y todos los proyectos están en función de ellas.
“La primera meta es crecer en promedio 4% al año hacia el 2021 y con los programas de largo plazo permitir una expansión de 5% hacia adelante”, aseveró Hernández.
La segunda meta es generar agroexportaciones por 10,000 millones de dólares hacia el 2021.
“La tercera es disminuir la pobreza rural que actualmente está en 43% a la mitad en el 2021. Por ello, todos nuestros programas apoyan al pequeño agricultor, que comprenden el 80% de los productores a escala nacional”, agregó.
La cuarta meta, explicó el ministro, es incrementar el ingreso per cápita de los agricultores en alrededor de 40% hacia el 2021.
“La apuesta del Gobierno es apoyar a los pequeños agricultores a fin de reducir la brecha tecnológica, disminuir su nivel de pobreza y rápidamente puedan insertarse al crecimiento del sector agroexportador”, finalizó.
(FIN) MDV
Publicado: 7/8/2017