La plaza mayor y la explanada del templo Inca del Qoricancha lucieron bajo un manto blanco, luego de la torrencial lluvia y caída de granizada que se registró en la ciudad del Cusco y con más intensidad en el centro histórico.
Las
precipitaciones pluviales que ya se sienten con mayor intensidad por esta época, pese a un retraso debido al probable del cambio climático, sorprendió a cusqueños y turistas nacionales y extranjeros que cumplían el “city tour”. Muchos de ellos se cobijaron en los portales.
Los copos de granizo rápidamente se hicieron de las áreas verdes incluso de los adoquinados y por sus bordes se hacían canales de agua que apenas podían ingresar a las alcantarillas, sumideros. Las calles adyacentes se habían convertido en ríos que llegaron al Huatanay, principal cuenca de la ciudad.
Pasado el fenómeno climatológico, los cientos de visitantes y familias cusqueñas se volcaron a las calles para formar los típicos osos, y al estar aún con la fiebre del mundial comenzaron a poner en sus cuentas de Facebook “Estamos en modo Rusia 2018”. La fiesta con la nieve duró hasta altas horas de la noche.
El director del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) Cusco, confirmó a la Agencia Andina que este fenómeno no se sintió en distritos aledaños, salvo la llovizna, y que el granizo llegó hasta los 15 centímetros, sin dañar casonas que alberga la zona monumental.
Igualmente, el viernes último, dijo, alrededor de 15 viviendas se inundaron en la provincia de Paruro, donde también se registró la caída de lluvia y granizada. No obstante, se evalúa afectaciones a la zona agrícola.
(FIN) PHS/TMC
Publicado: 19/11/2017