El secretario general de la Conferencia Episcopal Peruana, Norberto Strotmann, dijo hoy esperar una tregua entre la clase política, por lo menos durante los días que el Papa Francisco visite el Perú, a fin de tener serenidad y reducir las tensiones en ese ámbito.
Según confesó, en lo personal comparte la esperanza del presidente Pedro Pablo Kuczynski referida a que la presencia del
Papa Francisco pueda llevar a los peruanos por el camino del diálogo y contribuir
a la reconciliación nacional exhortada por el Mandatario.
“Supongo que, automáticamente, a partir de mañana, habrá cierta tregua entre todos los participantes en la política actual, porque todos van a mirar y escuchar lo que este gran personaje (el Papa Francisco) nos ha de decir”, manifestó en diálogo con la Agencia Andina.
A criterio de Strotmann, se necesita “mucho diálogo fiable”, en el marco de una reconciliación que -según dijo- tiene dos dimensiones: verdad y justicia, valores que no son negociables, ni con el Gobierno ni con la Iglesia.
Norberto Strotmann indicó que, bajo esa premisa, la visita papal constituye una ocasión para repensar “los asuntos de cada día” y asimilar de la mejor manera los valores del mensaje de unidad y esperanza con el que llegará Francisco y que serán fuente de inspiración.
Consideró, además, que la visita del Papa Francisco a Trujillo, zona afectada hace un año por El Niño costero, y a Puerto Maldonado, donde existe minería ilegal y otros delitos, tiene un significado especial, porque fueron lugares escogidos por el propio Sumo Pontífice.
“Para la Iglesia, la gente amazónica no es gente olvidada. El Santo Padre siempre les expresa su cariño y quiere reflejar el mandato de Cristo. Además, con su encíclica ‘Laudato si’ nos plantea su invitación a tener como pueblo una agenda ecológica y de cuidado de la selva”, refirió.
En opinión del monseñor Strotmann, la llegada del Papa Francisco genera emoción y entusiasmo en el pueblo católico, y ese mensaje que el Pontífice compartirá en suelo peruano inclusive despierta curiosidad en los peruanos que no son católicos.
“Para el pueblo, como tal,
la visita del Papa es una oportunidad de que nos distanciemos un poquito de los problemas que hay, sea en la familia, en la sociedad, en el Gobierno, a fin de tener nuevas perspectivas y nuevos ánimos para mirar hacia el futuro”, afirmó.
En ese sentido, el representante del episcopado peruano expresó su deseo de que el lema “Unidos por la esperanza”, escogido para la visita papal al Perú, pueda ser cumplido a cabalidad por el pueblo peruano.
En cuanto a la mención que el
Papa Francisco hizo ayer en Chile, donde
dijo sentir dolor y vergüenza por los abusos contra niños a manos de ministros de la Iglesia,
Strotmann dijo que ese mensaje refleja no solo el sentir de la Iglesia, sino de las personas en general.
Agregó que las vejaciones contra menores de edad son muy lamentables y generan daño no solo en las víctimas, sino también en la propia Iglesia, pues esta pierde credibilidad ante la sociedad.
“El mensaje de la Iglesia es que Dios nos quiere, y cuando los mensajeros abusan de tal manera, eso es muy duro para la Iglesia, porque nos quita credibilidad de una forma espantosa, y cambia no solo la imagen de la Iglesia, sino también la credibilidad de Dios. Es horrible”, aseveró.
El directivo del gremio de obispos coincidió en que los responsables de estos casos de abuso deben asumir su responsabilidad y ser sancionados con rigor, no solo en el ámbito civil y penal, sino también eclesial, pero sin caer en venganza.
(FIN) MVF/CCR
GRM
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Publicado: 17/1/2018