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Mi hijo tiene un compañero de clases con cáncer ¿Cómo ayudarlo a comprender la enfermedad?

El cáncer infantil. Foto: ANDINA/archivo.

El cáncer infantil. Foto: ANDINA/archivo.

21:44 | Lima, mar. 5.

Cuando nuestros hijos escuchan que un compañero de clases tiene cáncer puede sentirse confundido, con muchas preguntas, incapaz de procesar lo que está ocurriendo. Como adultos y padres, nuestro papel es ser guías en este momento difícil, ayudándoles a entender lo que sucede sin generarnos miedo innecesario.


Los niños, en muchas ocasiones, pueden no tener la capacidad de entender los detalles de esta enfermedad. Por eso, lo recomendable es evitar usar términos médicos complejos que puedan generar más confusión. 

En lugar de decir “el cáncer afecta a las células y tejidos del cuerpo”, opta por algo más simple como “el cáncer se genera porque hay partes internas del cuerpo que empiezan a crecer descontroladamente y se transforman
en bultos dañinos para el cuerpo”.

Las palabras como “muerte” o “tratamiento doloroso” pueden ser fuertes, sobre todo para niños pequeños. En lugar de profundizar en lo negativo, enfócate en los aspectos que generen esperanza. 

Puedes decirle: “Muchos adultos están cuidando de él, como sus padres y los médicos. Todos están haciendo lo mejor para ayudarlo a sentirse mejor y darle el apoyo que necesita”.


Por otro lado, es recomendable evitar hablar sobre el “peligro” de la enfermedad de manera dramática. En lugar de eso, enfócate en los aspectos positivos del tratamiento.

“A veces, los tratamientos pueden ser difíciles, pero los médicos saben lo que están haciendo, y hay muchas personas que se curan y se sienten mucho mejor después de pasar por ellos”, así se debe hablar con un niño.

Hablar de cáncer con un niño requiere ser sensible y empático, adaptando la información a su edad. A través de la comunicación abierta y explicaciones claras, el niño puede comprender la situación, apoyando a sus amigos con gestos amables como cartas o dibujos, mientras se transmite esperanza y comprensión. 

Además, es fundamental indicarle que su compañero no está solo en este proceso y que su apoyo puede marcar la diferencia.

Si el niño hace preguntas difíciles, como el pronóstico de su amigo o los tratamientos médicos, y no tienes la respuesta, es válido admitirlo con tranquilidad: “No lo sé, pero podemos averiguarlo juntos; lo importante es que los médicos están haciendo todo lo posible para ayudarle a mejorar”.

Esto no solo evita la desinformación, sino que también le enseña que está bien no tener, siempre, todas las respuestas.


María del Carmen Velandres, gerente de la Asociación de Voluntarias por los niños con cáncer Magia, dijo que uno de los aspectos más importantes cuando se habla con niños sobre el cáncer es transmitir un mensaje de esperanza.

“Aunque el cáncer es una enfermedad seria, muchos niños se sienten más tranquilos cuando entienden que existen tratamientos efectivos y que la recuperación es posible. No es necesario ofrecer promesas falsas, pero sí es importante recalcar que hay un equipo de médicos y expertos trabajando para ayudar a la persona enferma”, comenta.

También, podrías decirle a tu hijo: “Aunque esta enfermedad es difícil, muchos niños con cáncer se curan y viven felices después de pasar por el tratamiento. Lo más importante es que tu compañero tiene muchas personas que lo quieren y lo apoyan, y está recibiendo la ayuda que necesita para sentirse mejor.”

“La forma en que manejamos estas conversaciones también deja una huella en cómo los niños perciben temas de salud, enfermedad y empatía. Por lo tanto, es esencial tratar este tipo de conversaciones con cuidado, amor y una actitud positiva”, Indica la especialista. 

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(FIN) NDP/LIT

Published: 3/5/2025