El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Enrique Mendoza, inauguró el taller de panadería “San Pedrito” en el penal de Lurigancho, que brinda una oportunidad de trabajo remunerado para los internos, además de promover su resocialización mediante un trabajo productivo.
Durante la visita del titular de Justicia los internos lanzaron al mercado el panetón “San Pedrito”. Este producto es preparado por 23 reclusos que laboran en el taller y que han sido capacitados bajo un convenio entre Instituto Nacional Penitenciario (INPE) y la empresa privada.
“Este panetón es delicioso y de muy buena calidad. Sugiero a quienes gustan de los panetones, que son casi todos, lo compren”, manifestó el ministro Mendoza.
El taller producirá para empezar 10,000 panetones en temporada navideña, que serán comercializados a través del Bazar Paschi, ubicado en el Cercado de Lima.
Cuenta con cuatro ambientes iluminados y ventilados que han sido acondicionados para la elaboración de panes, pasteles y panetones, en el marco del programa “Cárceles Productivas” promovido por el gobierno mediante decreto legislativo 1343.
“Es un programa magnífico que está permitiendo que las penas de privación de libertad sean rehabilitadoras como lo establece la Constitución. Ese es nuestro propósito”, agregó el ministro.
Panetón para el Papa
La creatividad de los internos de Lurigancho los ha llevado a elaborar también el panetón “San Francisco”, en honor al sumo pontífice que visitará nuestro país en enero del 2018.
Al respecto, el titular del sector de Justicia se comprometió a entregar al Papa Francisco una canasta con los mejores panes y dulces elaborados en el taller “San Pedrito”.
“Le haremos llegar los productos de esta panadería que son un gran ejemplo a nivel latinoamericano”, destacó.
(FIN) NDP/JCC/SMA
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Published: 11/30/2017