La ministra de Economía y Finanzas, María Antonieta Alva, afirmó hoy que la cartera a su cargo no eligió a ninguna empresa beneficiada del programa Reactiva Perú, tanto en su primer como en su segundo tramo.
Durante su participación en la Comisión de Fiscalización y Contraloría del Congreso de la República, explicó que la elección de las empresas beneficiadas se da a criterio de las entidades financieras que participan en base a los requisitos fijados.
“El dinero sale del Banco Central de Reserva (BCR) y es otorgado por las entidades financieras. El papel del MEF es dar la garantía en caso la empresa no pague”, manifestó.
Anotó que hasta el momento el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) no ha desembolsado un sol del tesoro público para el Programa Reactiva Perú. “Si pasado el periodo de gracia de 12 meses la empresa no paga, recién ahí el MEF desembolsa recursos”, subrayó.
Aseveró que si se comprueba que la entidad bancaria entregó crédito a una empresa que no cumple los requisitos establecidos en la normativa de Reactiva Perú, el MEF retira la garantía.
“Si se demuestra algún incumplimiento, simplemente el MEF sale de la foto y ya no entrega garantía. En ese escenario, la empresa y la entidad financiera se las arreglan solos para pagar el préstamo”, remarcó.
Requisitos
En esa línea, la ministra precisó que los requisitos establecidos son: ser un buen contribuyente y buen pagador antes del covid-19, y registrar información de nivel de ventas y de planilla.
Además, dijo, Reactiva Perú excluye a empresas vinculadas a procesos de corrupción (Ley N° 30737 o “Ley Odebrecht”).
Explicó que para acceder de Reactiva Perú, los gerentes generales de las empresas tuvieron que presentan una declaración jurada de no estar vinculadas a procesos de corrupción.
“De igual manera, las entidades financieras presentan a Cofide una declaración jurada de que las empresas solicitantes no están en el ámbito de la Ley 30737”, subrayó.
En otro momento, apuntó que la creación de Reactiva Perú fue necesaria porque en una situación de crisis como la ocasionada por el covid-19, se genera el riesgo de cierre masivo de empresas y de la economía en su conjunto.
“Sin empresas no hay inversión, producción ni empleo, lo cual afecta el ingreso de las familias y su consumo. En esta situación de riesgo se necesitaba de un instrumento para evitar el colapso de la cadena de pagos”, puntualizó.
(FIN) RGP/JJN
Published: 8/18/2020