Una turba de alrededor de un millar de personas atacó con piedras y otros objetos la vivienda del gobernador regional de Madre de Dios, Luis Otsuka, quien hizo uso de su arma de fuego con disparos al aire para repeler la agresión.
Los vándalos, que participaban de una marcha en la ciudad de Puerto Maldonado, se dirigieron a la casa del gobernador Otsuka, que era custodiada por seis policías que solo tenían gases lacrimógenos y escudos. Aprovechando esa poca vigilancia, la turba comenzó a lanzar piedras contra el inmueble e intentó incendiarlo.
El asalto causó heridas en la autoridad regional y en algunos de sus familiares. Debido a este feroz ataque, Otsuka sacó su arma de fuego e hizo disparos mientras llegaban más efectivos policiales.
Los vándalos destrozaron la puerta de ingreso a la vivienda y rompieron todas las lunas, además de ocasionar daños a su vehículo.
A esta hora la turba sigue en la zona, pero el gobernador de Madre de Dios y sus familiares ya fueron trasladados a un lugar seguro.
En declaraciones a Canal N, Otsuka pidió al Gobierno tomar una decisión y poner fin al vandalismo y bloqueo de carreteras que afectan a diversas regiones, entre ellas Madre de Dios. "No se puede enviar a los policías a enfrentar a los vándalos sin armas con el argumento del costo social. Hay que tomar una decisión y poner fin a esto", aseveró.
Afirmó que no permitirá que los vándalos atenten contra él y su familia. "Tengo que defender a mi familia, lo mío. Yo no he robado, lo que tengo me ha costado. La próxima vez que vengan los mataré, si la policía no lo hace lo haré yo", aseveró.
Sostuvo que no se debe permitir que los
vándalos provoquen daños y tomen la carretera matando de hambre a la población. Organizaciones de Madre de Dios acatan un paro de 48 horas y se sumaron a las protestas contra el Gobierno.
Más en Andina: