El presidente de Perupetro, Seferino Yesquén, destacó la presencia de la transnacional British Petroleum (BP) en el país, mediante la suscripción de seis convenios de evaluación técnica, lo que no solamente impactará positivamente en el desarrollo de esta industria, sino también en el mejoramiento de la competitividad del sector petrolero peruano.
¿Cuál es la evaluación que hace del 2019 para Perupetro?
Ha sido un año de inflexión en lo que a producción petrolera se refiere, pues se reportó un nivel de 63,700 barriles diarios en noviembre último frente a los 38,000 barriles registrados en el 2017.
Ello fue posible gracias al aporte del Lote 95, a cargo de Petro Tal, así como también a la perforación de más pozos en el Lote 10 por parte de CMPC.
Algo muy positivo fue la continuidad de las operaciones del Oleoducto Nor Peruano, que ya no sufrió más atentados. Eso hizo que la producción de petróleo alcance precisamente los 63,700 barriles registrados en noviembre, con la posibilidad de seguir incrementando la producción.
En cuanto a gas y líquidos de gas, la producción ha sido prácticamente estable. No hubo mayores inversiones, pero ello está dentro de los pronósticos que teníamos para este sector.
El impacto del incremento de la producción de petróleo lo veremos claramente en el producto bruto interno (PBI) de noviembre.
En lo que se refiere a nuevos contratos suscritos, ¿cuáles han sido los resultados?
Lo más importante fue la firma con Tullow Perú Limited para el desarrollo de Lote Z-64. Después de un arduo trabajo de participación ciudadana y de comunicación con las autoridades y representantes de la sociedad civil, logramos firmar este contrato en mayo último.
Asimismo, intensificamos nuestra promoción en el extranjero, participando en grandes eventos.
Para satisfacción nuestra, los comentarios fueron muy favorables. Así, tuvimos presencia en Texas y Houston (Estados Unidos), Canadá, Argentina y Colombia, donde vieron con sumo interés nuestras propuestas.
Sostuvimos reuniones con varias empresas, sobre todo en Texas y Houston. Una de ellas fue con British Petroleum (BP).
¿Cuáles han sido los resultados con BP?
Los mejores. Con BP logramos un acercamiento a raíz de nuestra presentación en Houston, lo que motivó que la empresa enviara una delegación al Perú.
Recientemente, suscribimos seis convenios de Evaluación Técnica-Contrato (CET-C), que permitirán que BP haga estudios geológico-geofísicos integrales en la cuenca Salaverry. Este ha sido un gran logro.
A ello se suma que Occidental Petroleum Corporation (Oxy) adquiera Anadarko, que cuenta con tres lotes off shore en el Perú . Esta compra convirtió a Oxy en la tercera petrolera más grande de Estados Unidos.
Hace mes y medio, una delegación de Oxy vino al Perú para comunicar que continuará con el desarrollo de los proyectos de Anadarko.
El ingreso de BP trae muchas cosas positivas. Es considerada una de las más grandes del mundo y cuando una empresa de este nivel llega a un país, genera la posibilidad de que otras similares también lo hagan, lo que incide en una mejora sustancial de los servicios petroleros para satisfacer sus requerimientos.
Se trata de otro nivel de exigencia, ya sea en el aspecto técnico, de seguridad, social y ambiental.
Además, los profesionales peruanos se alimentarán de esta gran experiencia y nuevos conocimientos.
Por ello, debemos prepararnos porque una empresa de esta envergadura no viene a perder el tiempo y tenemos que estar a la altura de este compromiso.
Perú Petro y Petroperú han conformado un grupo de trabajo, ¿cuál es el objetivo?
Es un grupo conformado también por otras empresas petroleras. El objetivo es destacar la importancia de la permanente operatividad del Oleoducto Nor Peruano.
Pretendemos mostrarle al Gobierno el positivo impacto que ello tendrá en la economía peruana y en el desarrollo de las comunidades. La única forma que tenemos para desarrollar la reserva de la selva es que el oleoducto siga operando sin problemas.
¿Cuál es el potencial de producción de la selva con la operación permanente del oleoducto?
La puesta en valor del oleoducto permitirá transportar toda la producción de la selva. Si todo va bien, esta zona podría producir más de 100,000 barriles diarios de petróleo.
Por ahora tenemos restricciones, pero cuando comencemos con los lotes 64 y 67, estamos seguros de que al 2023 alcanzaremos la meta de los 100,000 barriles de petróleo diarios, aunque la selva tiene para producir mucho más.