Los semáforos mal llamados “inteligentes”, instalados en diferentes cruces de Lima y Callao, son solo sincronizados y no ayudan a descongestionar el caos vehicular existente en la ciudad. Por ello, profesionales de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) ofrecen sus conocimientos y tecnología para solucionar este problema.
“En estas grandes ciudades, con un parque automotor mucho más grande que Lima, conocen el comportamiento de los buses y de todos los vehículos en base a la data que es proporcionada por cámaras y sensores, y que luego es procesada por una computadora”, explicó Tenorio en declaraciones a la Agencia Andina.
Dijo que el CTIC-UNI posee todo un equipo de alto rendimiento, que incluye una computado HPC (High Performance Computer) que procesa en tiempo real los datos proporcionados por sensores instalados en los semáforos.
Indicó que cada uno de estos sensores, que también han sido diseñados por los especialistas del CTIC, tiene un precio aproximadamente de 7 dólares.
“Estos sensores procesan la información, ven la respuesta en fracción de segundos, toman la decisión y juegan con los tiempos de los semáforos para optimizar el tráfico y descongestionar los cuellos de botella”, detalló.
En tal sentido, Tenorio refirió que el CTIC de la UNI cuenta con la tecnología y los conocimientos que pueden ser transferidos a una municipalidad que desee
encontrar una solución al problema de la congestión vehicular en su jurisdicción.
Lamentó, sin embargo, que todo este
trabajo de investigación, en el que invirtió más de 400,000 soles, no ha podido ser aplicado hasta el momento en ninguna
municipalidad distrital, ni tampoco en la
Municipalidad Metropolitana de Lima.
“Falta mucha decisión política. Este proyecto puede ser una vía, una alternativa. Pero las autoridades municipales no te abren las puertas, y prefieren comprar una solución a un fabricante, y no preocuparse en adaptar estas soluciones que hacen las universidades con mucho esfuerzo”.
Señaló que la UNI hace investigación aplicada en Perú pero no siempre ocurre lo que sí sucede en países desarrollados: que esa tecnología es transferida a toda institución o aparato público.
(FIN) LIT/RRC
JRA
Published: 4/1/2018