La Orquesta Sinfónica Nacional, la procesión de la Virgencita Candelaria, danzas originarias con trajes autóctonos y de luces engalanaron esta noche el Gran Teatro Nacional, que por cuarto año consecutivo fue escenario del inicio de actividades de la Festividad de la Virgen de la Candelaria 2019.
La ministra de Cultura, Patricia Balbuena, destacó la importancia de esta festividad, una de las manifestaciones culturales más importantes del país, que se celebra en Puno y que el 2014 fue declarada
Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
“La Festividad de la Virgen de la Candelaria es una de las expresiones de religiosidad que congrega, tradicionalmente, a
miles de turistas, entre nacionales y extranjeros, para disfrutar de la máxima expresión de la cultura viva”, resaltó.
Uno de los elementos más destacados de la festividad, que se celebra durante febrero de cada año en la ciudad de Puno, son los concursos de danzas y trajes, en los que unos 40,000 bailarines y músicos se disputan el reconocimiento del jurado y el público.
También los coloridos pasacalles que recorren la ciudad y rinden homenaje a la imagen de la
Virgen de la Candelaria frente a su santuario, la antigua capilla de San Juan.
En su esfuerzo por apoyar la descentralización de las diferentes manifestaciones culturales del país, para el Ministerio de Cultura resulta vital promover acciones conjuntas que expresen el interés por su salvaguarda, promoción y difusión.
A la ceremonia del inicio de actividades de esta festividad también acudieron directores y gestores culturales de las organizaciones folclóricas de Puno; así como sus pares Lima vinculadas a la festividad.
De igual modo, miembros de la Comisión de Cultura del Congreso, funcionarios de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Puno.
Durante la ceremonia, la ministra Balbuena hizo entrega de la declaratoria de Patrimonio Cultural de la Nación a la música y
danza Warak´eros de la provincia puneña de Sandia.
La danza Warak’eros de Sandia es una práctica musical y danzaria representada con una indumentaria tradicional de gran contenido estético y simbólico.