El Perú ratifica su compromiso inquebrantable con el desarme y la promoción de un orden basado en el respeto al derecho internacional, sostuvo el canciller, Elmer Schialer, durante su participación ante el segmento de alto nivel de la Conferencia de Desarme, que se realiza en Ginebra.
De acuerdo con ello, añadió que los peruanos “estamos convencidos de que el multilateralismo es la única vía efectiva para abordar estos desafíos globales… Reafirmamos, entonces, nuestro compromiso con el desarme, con el multilateralismo y con un orden internacional que promueva la paz, seguridad y el bienestar de todas las naciones. Solo así podremos cumplir nuestra prioridad última, es decir, un mundo más seguro, pacífico y sostenible”.
Indicó que, ante la persistencia en el uso de municiones prohibidas en algunos de los conflictos actuales, el Perú renueva su compromiso con los tratados de desarme humanitario.
“Dicho compromiso se traduce en acciones concretas, como la eliminación total de nuestras bombas de racimo, en cumplimiento de la Convención de Oslo, y el esfuerzo conjunto con el Ecuador en el desminado humanitario binacional. Por ello, expresamos nuestra preocupación por toda decisión que afecte la universalidad de dichas convenciones”, manifestó.
La conferencia
En ese orden de cosas, consideró que la Conferencia de Desarme -en su función de foro multilateral especializado en negociación sobre la materia- “debe ser el epicentro de los esfuerzos para construir una arquitectura de seguridad internacional basada en la paz, la transparencia y el respeto mutuo”.
Anunció que la Conferencia de Desarme, en el marco de su programa de trabajo para el año 2025, designó al Perú como facilitador de las discusiones sobre el cese de la carrera armamentista nuclear y el desarme nuclear. “Esta designación refleja el reconocimiento de los Estados Miembros de la Conferencia a la política exterior del Perú en materia de desarme basada en su vocación pacífica”.
También se refirió a la necesidad de redoblar esfuerzos para que la referida Conferencia recupere su capacidad de negociación, que lleva ya más de dos décadas de estancamiento.
“El mundo atraviesa un periodo de gran complejidad, marcado por la incertidumbre y la proliferación de conflictos bélicos y nuevos focos de violencia que amenazan la paz y la seguridad internacionales. Esta situación no solo socava los principios fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional, sino que pone en riesgo el bienestar y la supervivencia de la humanidad entera”, refirió.
(FIN) NDP/CVC
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Publicado: 26/2/2025