Un mirador en el Museo Nacional Sicán, ubicado en la provincia lambayecana de Ferreñafe, se contempla construir como parte de las propuestas de proyección del recinto cultural con el fin de ofrecer una vista panorámica de 360 grados del santuario histórico Bosque de Pómac, el complejo arqueológico de Túcume y el sitio arqueológico de Batán Grande, así como el tambo Real, el canal Taymi y el cerro Reque.
El director del
Museo Nacional Sicán, Carlos Elera Arévalo, compartió esta iniciativa con la
Agencia Andina al destacar que desde este mirador se podrá disfrutar de una vista panorámica de 360 grados de los elementos más representativos de la arqueología e historia lambayecana.
“Hará las veces de un anfiteatro, desde donde los visitantes podrán tener una visión inicial del valle más extenso de la costa peruana, irrigado por el río Taymi, un canal artificial que data de hace más de 1,000 años. Además, los visitantes podrán apreciar Sipán, Pómac y Túcume, y facilitar la comprensión del entorno cultural y paisajístico de la región”, resaltó.
Asimismo, Elera Arévalo informó sobre los trabajos de ampliación y mejora de la infraestructura del museo ferreñafano. “El edificio está casi completo; se están terminando los acabados del tercer piso y también estamos trabajando en el ascensor. En general, el progreso es del 80 %. Se espera concluir la obra, en su primera etapa, a finales de enero del 2025”, estimó.
El arqueólogo comentó que se están definiendo los tonos cromáticos de las pinturas murales y el tipo de mobiliario que se utilizará en el renovado edificio.
Proyectó que el
Museo Nacional Sicán cerrará el año con unos 20,000 visitantes.
“Este es un paso significativo para alcanzar las cifras previas a la pandemia. El museo estuvo cerrado debido a las obras de construcción, lo que llevó a que muchos visitantes vayan al santuario histórico Bosque de Pómac, que es un verdadero tesoro cultural. El museo nacional es el hogar de las riquezas culturales del santuario”, puntualizó.
“Con optimismo, consideramos que el reciente reconocimiento del santuario histórico con la jerarquía 4 impulsará la promoción de esta área y, por ende, del museo, que se encuentra en la ruta hacia Pómac. Los turistas que visitan Pómac desean conocer el bosque y sus huacas, pero antes pueden explorar el museo”, concluyó.