Por Sofía PichihuaLas startups son la nueva carta de presentación del Perú ante el mundo. Se trata de nuevas empresas basadas en innovación y tecnología, con potencial de rápido crecimiento y escalabilidad.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en el Perú existen menos de 500 startups.
En el 2018 se estima que estas nuevas empresas se elevarán en 60%, precisó Gonzalo Villarán, director general de Innovación del Ministerio de la Producción.
Explicó que este panorama se confirma con el incremento de incubadoras y postulaciones de innovación.
Pero aún hay mucho trabajo por hacer. Según el
Global Entrepreneurship Index el Perú se encuentra en el puesto 67 de 137 países que promueven la innovación y el emprendimiento a nivel mundial y en el
puesto 7 de 24 países a nivel de América Latina y El Caribe.
A la fecha, la iniciativa
Start Up Perú de Produce ha beneficiado a 309 startups peruanas con capital y mentoría.
En su opinión, las startups peruanas abren mercados en el Perú y en otros países,
principalmente de la Alianza del Pacífico, sostuvo. “Los estudios revelan que las nuevas compañías son las que están generando riqueza y puestos de trabajo”, dijo Villarán.
Y las empresas beneficiadas por
Produce son prueba de ello.
Las ocho startups que cumplieron el ciclo de financiamiento generaron más de 9 millones de soles en venta en los últimos 36 meses. Solo en el último año han creado 182 puestos de trabajo directos y 1,645 indirectos.
“Estos números pueden no parecer impresionantes pero considerando que estas empresas tenían ventas mínimas en el 2014 podemos deducir lo rápido que pueden crecer. Esa velocidad de crecimiento es lo que hace atractivas a las startups”, agregó.
Villarán destacó que las corporaciones tradicionales ya tienen en la mira a las
startups para integrarlas a su modelo de negocio. “Las incluyen para hacer crecer sus productos y servicios con más tecnología. Recién comienza esta historia en el Perú. Afuera ya es común”, manifestó.
Oportunidades para startups
Silicon Valley -como se conoce a una zona de San Francisco, en Estados Unidos- es un sueño para los emprendedores, pues aloja a las corporaciones tecnológicas más exitosas y a las empresas en formación (startups).
“Silicon Valley no debe verse como un lugar, sino como un estado de mente, pues refleja una mentalidad innovadora. La gente piensa en cómo van a ser las industrias del futuro. Debemos identificar en qué somos buenos y qué ventajas comparativas tenemos para establecer políticas y mecanismos, y así definir nuestro propio ecosistema de innovación”, opina Villarán.
Y a ello apuntan: la biodiversidad peruana es una clave de innovación a nivel global, y ya tienen estrategias para potenciarla.
Para ello Produce tiene dos mecanismos de apoyo definidos: financiamiento económico a las startups y apoyo al ecosistema de innovación fortaleciendo incubadoras.
Startup Perú tiene 247 beneficiarios en Lima y 69 en 18 regiones. De éstas, las más representativas son Arequipa, Piura y Trujillo. Es decir, el 79 % de las startups se encuentra en Lima y el 21 % en las regiones.
En el 2017 se han destinado 14 millones de soles entre 135 startups y se tiene previsto invertir 11 millones de soles en el Reto Bio.
“Esta iniciativa busca fortalecer emprendimientos e investigaciones alrededor de la biodiversidad peruana para lanzar un producto en el mercado basado en la innovación”, añadió.
Innovate Perú, Start Up Perú y Concytec reúnen las principales oportunidades, pero no son las únicas. Al menos 23 universidades e iniciativas privadas desarrollan mentoría, apoyo económico y networking con startups peruanas.
En tanto, el
Centro de Emprendimiento de la Universidad del Pacífico ha incubado 25 proyectos. También ha asesorado más de 700 planes de negocios y cerrará el año con siete emprendimientos acelerados. Hasta setiembre,
Emprende UP apoyó a cuatro startups. La iniciativa ha otorgado más de 300 becas y organizado 70 talleres.
Wayra ha invertido cerca de 4.5 millones de dólares en las 47 startups digitales aceleradas desde su fundación en el 2011. Se ofrece espacio físico, acceso a una red de mentores y expertos, vinculación con inversionistas, descuentos en tecnologías, consultoría en temas de negocios y tecnología, así como una sinergia comercial con Telefónica.
Este año Telefónica Open Future ha lanzado tres asociaciones que tienen la finalidad de incubar proyectos en alianza con la Municipalidad de Miraflores, el Gobierno Regional de Ica y la Universidad de Piura.
Por su parte,
el Centro de Innovación y Desarrollo Emprendedor CIDE-PUCP ha brindado acompañamiento y seguimiento a 260 startups y a más de 729 emprendedores en los últimos 20 años.
Los emprendedores reciben capacitación empresarial,
asesorías personalizadas y apoyo técnico e institucional de la PUCP. Solo en el 2017 hay 51 empresas en incubación.
El programa tiene un convenio con la Municipalidad de San Isidro para trabajar proyectos de innovación y emprendimiento.
Retos pendientes
Si queremos que las startups eleven su potencial, la normativa actual necesita algunas mejoras, coinciden en afirmar los especialistas consultados por la Agencia Andina.
Villarán anunció que el Ministerio de la Producción presentará proyectos de ley que proponen mayor flexibilidad para desarrollar estrategias de negocios y de contratación.
“Por ejemplo, no se contempla la entrega de acciones como parte de pago a los trabajadores de la compañía. Hay cosas por mejorar. Estamos trabajando en eso”, añadió.
Al respecto, Luis José Giove, jefe de Incubación Empresarial de Emprende UP y gestor de la red de Inversionistas Ángeles, dijo a la Agencia Andina que lograr que “un área se convierta en un centro de emprendimiento e innovación (realmente competitivo) es una tarea muy larga”.
En su opinión, se requiere revisar las normas de la SBS para el tratamiento de las transacciones financieras, así como establecer reglas claras en Indecopi para las startups de economía colaborativa.
Alexander Gómez, Director Ejecutivo de Telefónica Open Future_ Perú, señaló a la Agencia Andina que las startups son compañías experimentales que tienen alta probabilidad de fracaso. “Hoy es fácil abrir una empresa, pero sumamente laborioso y caro cerrarla. En EE.UU. es barato y fácil cerrar una empresa. Incluso de manera 100% virtual”, precisó.
Otro reto pendiente es flexibilizar las leyes para evitar la doble tributación. “Las ganancias obtenidas por inversionistas estadounidenses, por ejemplo, se tributan actualmente tanto en EE.UU. como en el Perú. Esto es poco atractivo para los inversionistas que quieren invertir en startups peruanas”, refirió.
El director del Centro de Innovación y Desarrollo Emprendedor de la PUCP, Julio Vela, sostuvo que se requieren reformas que faciliten la operación de empresas en internet. “Por ejemplo, se requiere el uso de la firma electrónica, que en Chile y México ha permitido reducir significativamente el número de días necesarios para crear una empresa”, declaró a la Agencia Andina.
Malas prácticas
Además, otro problema es que las startups -en promedio- pueden estancarse a los tres años debido a qla baja rentabilidad. El Dr. Alejandro Morales, especialista en Derecho Corporativo y Asesor de Startups de Torres y Torres Lara Abogados, señaló a la Agencia Andina que un error frecuente es que las compañías no establecen convenios entre socios. “Se requiere establecer mayorías para la adopción de acuerdos, estipular la entrada o salida de socios, crear cláusulas de no competencia, determinar las ganancias de cada socio, entre otras medidas”.
Tampoco se define la titularidad de los softwares y otros activos intangibles en la compañía.
Y otro gran error es que los emprendedores caen en la informalidad trabajando como personas naturales. Para mejorar esta situación se deben crear normas tributarias y laborales que incentiven la formalización de los empresarios.
(FIN) SPV/RMR/JJN
Más en Andina:
Publicado: 29/9/2017