“Los delincuentes aprovechan las vulnerabilidades en las tecnologías utilizadas por las empresas, ya sean nuevas o 'legacy', para perpetrar estos ataques. En Perú, los intentos de suplantación de identidad por uso de documentos alterados representan el 10% de las transacciones digitales de las empresas que usan nuestros servicios, los cuales logramos detectar y frenar con nuestros sistemas”, explica Felipe Sánchez, gerente de Productos de Verificación de Identidad en Sovos.
Ante esta realidad, las organizaciones deben implementar sólidos mecanismos de seguridad, como sistemas de verificación de identidad mediante biometría y firma electrónica para proteger a sus clientes. Estos métodos incluyen la verificación facial mediante selfies, el análisis de documentos de identidad con redes neuronales convolucionales para detectar alteraciones y la contrastación de información con organismos gubernamentales.
Una de las tecnologías más utilizadas para la verificación de identidad digital es el "face onboarding", que requiere una selfie y la comparación de datos biométricos en el documento de identidad. Este método emplea cinco pilares de seguridad en la prevención del fraude:
• Fake ID: Detecta la autenticidad de los documentos de identidad mediante la búsqueda de características específicas en la imagen.
• Detección de vida: Asegura que la persona detrás de la cámara sea real, utilizando visión computacional e inteligencia artificial para prevenir grabaciones o máscaras.
• Listas de denegación: Controla personas involucradas en fraudes previos mediante el reconocimiento facial o de documentos de identidad.
• Integración con agencias del gobierno: Valida la vigencia y autenticidad de los documentos mediante registros gubernamentales.
• Un rostro - una identidad: Asocia un rostro con una única identidad para evitar suplantaciones.
“En el Perú, la industria financiera lidera el camino en la implementación de soluciones de verificación de identidad digital, utilizando la biometría para operaciones como apertura de cuentas bancarias y otorgamiento de créditos de forma remota. Además, algunos bancos han implementado soluciones biométricas para autenticar a sus clientes en cajeros automáticos y aplicaciones móviles, mejorando la seguridad de las transacciones financieras”, comenta el experto de Sovos.
Sin embargo, la biometría digital no se limita al sector financiero. En el ámbito de las telecomunicaciones está facilitando la firma de contratos de servicios mediante la autenticación biométrica, ofreciendo a los clientes una forma segura y conveniente de acceder a los servicios y realizar transacciones. Incluso los gobiernos están adoptando la biometría para identificar y autenticar a sus ciudadanos, simplificando los procesos burocráticos y ofreciendo servicios en línea más eficientes.
La reducción del fraude en las organizaciones que implementan eficazmente mecanismos de verificación de identidad digital integrada puede oscilar entre un 70% a 80%, dependiendo de la industria, el tipo de verificación utilizada y la calidad de la implementación.
“Otro beneficio importante de la biometría es su versatilidad y aplicabilidad en una amplia gama de escenarios y dispositivos. Desde la autenticación facial en teléfonos inteligentes hasta la verificación de huellas dactilares en cajeros automáticos, la biometría digital puede adaptarse a diferentes contextos y necesidades, proporcionando una solución de seguridad escalable y flexible para las empresas”, asegura Daniel Benalcázar, experto en detección de fraudes en Sovos.
Recomendaciones
Para mitigar el riesgo de suplantación de identidad, los expertos de Sovos recomiendan a las empresas contratar servicios especializados en verificación de identidad y estar al tanto de las últimas tecnologías y normativas, como la norma ISO 30107-3, que establece métodos de defensa contra el 'spoofing'.
Además, concientizar a sus equipos siguiendo estas recomendaciones:
• Promover el conocimiento sobre el riesgo: Para evitar ser víctima de los suplantadores de identidad, lo primero que deben hacer las empresas es incluirlo dentro de su matriz de riesgos para gestionarlo adecuadamente y definir los controles que les permitan mitigar su probabilidad de ocurrencia o su impacto en caso de materializarse.
• Verificar la fuente: Siempre verificar la legitimidad de los correos electrónicos, mensajes o llamadas telefónicas antes de proporcionar información personal o financiera.
• Tener varias capas de seguridad: Es fundamental la implementación de varias medidas de seguridad complementarias para ayudar a disminuir las probabilidades de que un ataque no sea detectado.
La suplantación de identidad es un desafío complejo que requiere soluciones integrales y actualizadas. Con una combinación de tecnología avanzada y buenas prácticas de seguridad, las empresas peruanas pueden protegerse y mantener la confianza de sus clientes en un entorno digital cada vez más desafiante.